Avanza la investigación por los dos crímenes en Viedma

La Policía secuestró un vehículo en el barrio Castello que estaría relacionado con el asesinato de Osvaldo Gómez.

Policiales

Avanza la investigación para tratar de esclarecer los dos asesinatos cometidos ayer en la capital provincial.

Uno de los datos que trascendió en la mañana de hoy es el secuestro de un auto Chevrolet Corsa, tres puertas, en el barrio Castello que tendría vinculación con la aparición del cuerpo calcinado de Osvaldo Gómez en un terreno baldío del barrio Mi Bandera.

Por otra parte, se supo que el único detenido por el asesinato de Carlos Relmuan es un hombre de unos 30 años y fue interceptado por la policía en la tarde de ayer en la terminal de ómnibus.

Nadie recuerda un hecho semejante en la capital rionegrina como el perpetrado ayer con el hombre calcinado por la saña aplicada.

Por el cadáver que apareció quemado en inmediaciones de la cancha del Santo Fútbol Club del barrio Mi Bandera -que se levanta al lado del Lavalle en las afueras de Viedma- el fiscal Juan Pedro Puntel pidió las detenciones de cuatro personas, entre ellas dos mujeres, que fueron ordenadas por el juez penal de turno, Favio Igoldi, y concretadas por la Policía cuando la tarde comenzaba a caer.

Además otra persona fue detenida por el crimen de Carlos Relmuan de unos 25 años, quien fue encontrado en su casa de la calle 17 al 400 de aquel barrio con múltiples y graves golpes en el cráneo. Esta vivienda se encuentra a dos cuadras de donde apareció el cuerpo calcinado pero -hasta el momento- no habría indicios de relación entre ambos hechos.

Como Osvaldo Gómez de 72 años fue identificada la persona que apareció calcinado en un baldío aledaño a la cancha barrial.

Según trascendió el desafortunado hombre habría sido degollado y luego arrojado al baldío donde habría sido rociado con algún líquido que garantizara la destrucción del cadáver. Cerca de las ocho de ayer vecinos se encontraron con ese macabro hallazgo y avisaron a la Policía. El cadáver se encontraba casi quemado en su totalidad y sin los antebrazos.

A partir de ese momento con la intervención del fiscal Puntel y la participación de un importante grupo policial -además de personal del Gabinete de Criminalística- se inició una rápida investigación.

Pero mientras se trabajaba en el lugar se informaba también sobre un Astra gris azulado patente IGN 312 que cerca de la 1.30 de la madrugada fue arrojado al río Negro desde el muelle ubicado debajo del puente Ferrocarretero. Apenas fue advertida, la Policía concurrió al lugar a esa hora de la madrugada y amarró el vehículo para que la corriente no lo arrastrara. Con las primeras luces del día los efectivos de la comisaria 30 lograron ingresar al auto y rescatar la documentación donde figuraba el nombre de Osvaldo Gómez con domicilio en Mitre al 1.200, quien no fue encontrado en el lugar. Esta, tal vez, haya sido una de las primeras pistas que vincularon el cadáver calcinado con el vehículo.

Pasado el mediodía fue allanado el “Bar 14”, en Mitre y boulevard Sussini. Una cinta delimitó el local nocturno y se extendió hasta la vivienda de dos plantas de al lado, donde vivía Gómez y quien además era propietario del local comercial.

En el lugar los comentarios no se hicieron esperar y varios fueron los que coincidieron que en estos días el hombre renegociaba el contrato con quienes le alquilan el local que tiene una mesa de pull y agrupa una clientela barrial.

Dentro de la cinta perimetral quedó una rural Chevrolet Ipanema gris patente ADP 424 que sería de la pareja que alquila el local. Una mujer que se mantuvo sobre una moto frente al bar mientras se realizó el allanamiento fue identificada por los vecinos que se agruparon allí como una de las locatarias del edificio y sería una de las detenidas.

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