Bariloche del Este: habla el mentor de este megaproyecto urbanístico
Quién es. Qué equipo trabajó en este Nuevo Distrito que emerge en la ciudad lacustre. Cómo el tiempo post Covid incidió en el diseño.
¿Dónde y cómo viviremos de ahora en más? El futuro ya está sucediendo. Ahí está la respuesta. Y en este sentido -y en este tiempo Covid- se trabaja para la ciudad de la gente. Es decir, el ciudadano es el centro del nuevo urbanismo. Así lo entiende Juan Manuel Valcarcel, el mentor de Bariloche del Este, el Nuevo Distrito que está emergiendo en esta ciudad cordillerana. Es arquitecto, proyectista, autor de importantes emprendimientos urbanos y de obras de arquitectura en Argentina y Uruguay. Realizó estudios de grado en Sociología, y de posgrado en Urbanismo y en Teoría del Desarrollo Planificado en Europa.
Las revocas a lo largo de toda la avenida Mitre del Este también serán una seña de identidad del Nuevo Distrito que nace en Bariloche.
Contexto. La consultora internacional McKinsey afirma que hay cuatro ejes en la transformación que ciudad vive hoy: el talento de sus habitantes, la tecnología, el clima y la globalización. O sea, la atracción de la clase creativa hacia sus universidades, centros de investigación y start-ups; el desarrollo de tecnologías que mejoren los servicios públicos y la interrelación; el uso inteligente de los recursos naturales; la reducción de emisiones de gases, y la habilidad para liderar. Un sector de dirigentes y profesinales de Bariloche se encuadran en esta tendencia.
Vayamos al punto. “Bariloche del Este es un Distrito Urbano donde el peatón le presenta batalla al vehículo motorizado, con la incorporación protagónica de calles de convivencia, bicisendas, y un gran parque lineal que permite que la distancia de cualquier edificación nunca esté a más de 400 metros de estos enormes espacios verdes de más de tres kilómetros de longitud. Permite por primera vez en la ciudad la construcción de edificios en torre sobre la importante avenida Monseñor Esandi, convertida hoy en el nuevo acceso a la ciudad. Desde todo su extenso territorio, situado en la estepa del este, existen impactantes vista del lago y las montañas”, comenta Valcarcel.
“Capítulo aparte merece la existencia de una normativa sin antecedentes en el país, que permite, para el estímulo de la ejecución de la vivienda social, un 50% más de superficie construida y de altura, en aquellos terrenos, cualquiera que fuesen, donde se lleven a cabo obras de tal carácter”, agrega.
– ¿Cómo sigue de ahora en más este proyecto?
– Hay un importante trabajo técnico en la realización de los proyectos de infraestructuras de agua, electricidad, gas, cloacas y fibra óptica que se realizan y se seguirán realizando por etapas. Es un emprendimiento que abarca trabajos que se llevaran a cabo hasta cerca de los años 2040 o 50.
Toda la fracción del Nuevo Distrito presenta una topografía de suaves ondulaciones descendentes en dirección al lago Nahuel Huapi, lo que favorece las vistas desde cualquier sitio hacia el imponente paisaje.
Se estima que las obras más importantes que se ejecutaran en los primeros tiempos serán los edificios del Polo Educativo, varios barrios residenciales, los edificios de la importante Ciudad Judicial, los primeros edificios del centro administrativo y algunos servicios logísticos de pequeña y mediana escala. Ya existen grupos inversores que tienen avanzados proyectos de importantes edificios y conjuntos residenciales, comerciales y turísticos.
– ¿Desde cuándo estás con este proyecto estudiándolo, investigándolo, gestionándolo, proponiéndolo?
– Este proyecto es la continuación de un proyecto mucho mayor que lamentablemente se extinguió en una de las crisis económicas que tuvo el país a principio de la década del 80. El no haber abandonado los criterios de avanzada que tuvo aquel proyecto y la intervención en varios proyectos que se hicieron después de la frustración del gran proyecto anterior permitieron que entre el trabajo profesional de nuestro estudio y el área de Planeamiento del Municipio se fuera reconstruyendo la traza circulatoria original, que hoy puede comenzar a verse, uniendo el acceso al aeropuerto internacional y la Avenida Esandi.
Los espacios verdes son abundantes en toda la nueva urbanización, cuestión que nadie tenga que caminar más de 400 metros para encontrar uno.
Desde el antiguo proyecto que aprobó el intendente Osmar Barberis en el 78 y el actual, han pasado 45 años de trabajo constante. El viejo sueño de hacer crecer a la ciudad hacia la estepa y no hacia la majestuosa naturaleza, dañándola irremisiblemente, se ha ido cumpliendo. Pasaron muchos intendentes, funcionarios y técnicos de todo carácter, pero el trabajo planificado, como nunca se había realizado va mostrando sus resultados. Bariloche merece mucho mas cuidado y valoración.
– ¿Qué equipo profesional ha embarcado en todo esto?
– En este casi medio siglo de actividad profesional han participado un relevante grupo de profesionales y especialistas de las diversas disciplinas que se requieren en proyectos de esta escala. Pero la gran mayoría de los mismos son personas que han pasado gran parte de sus vidas en Bariloche. Conocen su origen, sus particular cultura, su clima, su ambiente natural, sus materiales y fundamentalmente la experiencia local que permite una concepción de diseño y desarrollo adecuada a las reales necesidades de la ciudad.
Pero hay que destacar que el proyecto fue incorporando aportes de los especialistas del Municipio, a través de criticas y opiniones que durante muchos años, fueron conformado el proyecto final.
– Según su perspectiva, ¿qué valor y qué significado tienen Bariloche del Este para esta ciudad?
– En las últimas décadas la ciudad ha sufrido serias afectaciones a su conformación urbana. La ciudad se fue degradando lenta pero permanentemente.
Creció en forma espontánea, sin ningún plan, y lógicamente, cada construcción que se agregaba emplazada en sitios sin ninguna planificación requería infraestructura, equipamiento y servicios que se demandaron desde sitios ubicados a veces a más de 200 metros de altura sobre el lago y a muchos kilómetros del centro. No hay finanzas públicas que puedan soportar tales requerimientos.
Hoy se sabe que en el espacio que posee este emprendimiento que se puede realizar en cada terreno y como debe ser el crecimiento del sitio. Esto permite al Municipio, a la Cooperativa de Electricidad y Saneamiento, a Camuzzi Gas del Sur o a Aguas Rionegrinas saber donde estará la demanda y que características particulares tendrá.
Esto permitirá reducir costos, que finalmente son absorbidos por todos los habitantes y aumentar considerablemente la eficiencia y calidad de cada servicio. Por otra parte, si el cuidado de cada etapa del proyecto se mantiene e incluso, se optimiza, habrá un nuevo territorio que se adapte a los nuevos requerimientos y demandas de los usuarios.
– En qué medida este mega proyecto se ajusta a los nuevos paradigmas de este tiempo de post-pandemia?
Aun antes de la pandemia, las nuevas teorías urbanísticas planteaban pautas de gran transformación. Revalorización fuerte del espacio público, destinado para el disfrute e intercambio de los habitantes, un contacto más directo con los espacios verdes de usos recreativos y deportivos, una gran mistura de usos que permita tener todas las actividades esenciales a menos de 15 minutos en forma peatonal o a través de transporte no motorizado, una primacía absoluta del peatón sobre el automóvil para disminuir la congestión y la contaminación y también la indispensable conectividad que requieren la nuevas ciudades inteligentes.
Creo que Bariloche del Este coincide con el concepto de diseño planificado de las nuevas áreas urbanas, que se están comenzando a plantear frente a la transformación que ha generado la pandemia en todo el mundo.
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