«De vieja por el mundo», el musical que empieza en Europa y termina en el Valle

“De vieja por el mundo” es el ambicioso y original proyecto creado y dirigido por el cipoleño Leandro Zalazar (“Sobreturno”), que tendrá escenas filmadas y actuadas en Italia y Francia.

De vieja por el mundo? Sí, de vieja. No de viaje. O también? Podríamos decirlo así: tres viejas en viaje. Tres viejas muy especiales que darán vida a una comedia musical donde su autor, el cipoleño Leandro Zalazar, una de las viejas en cuestión, toma riesgos en busca de una de una obra ambiciosa por donde se la mire.
“De vieja por el mundo”, tal el nombre del proyecto teatral en cuestión, es, de algún modo, el diario de viaje de tres señoras mayores que deciden viajar a Europa por primera vez. La historia surge de la imaginación de Leandro Zalazar, pero el viaje es real.

Antes de viajar. Miriam Rotter, Leandro Zalazar y Cinzia Soprano.

Parte de la osadía de este proyecto es que incluye escenas de exteriores filmadas en locaciones italianas. De hecho, el equipo de producción de nueve personas está allí en este momento.
Porque parte importante de la osadía de este proyecto es que la puesta en escena incluye enormes pantallas led que proyectarán las escenas europeas que se articularán con lo que suceda sobre el escenario.
El equipo de nueve personas, que incluye al propio Zalazar, a las actrices Miriam Rotter y Cinzia Soprano, quienes interpretaran a las damas en cuestión, y a Camila Sifuentes, quien estará a cargo de la producción audiovisual, ya se encuentra en Italia, donde rodaron las primeras escenas en Roma. Las siguientes locaciones serán en Venecia y París..

En las callecitas de Roma. Blanca, Pía y Rosa.

El grupo partió a Europa el 31 de marzo pasado y permanecerá allí hasta el 28 de abril, día en que regresarán al país para continuar con la producción de la obra, que tiene fecha estimada de estreno para el mes de agosto.
“‘De vieja por el mundo’ es un musical que reúne cine y teatro”, resume Leandro Salazar, en diálogo con “Río Negro”, días antes de partir en viaje rumbo a Italia. “Las historias se van a contar a través de las escenas que se proyectan en pantallas led. Se generan un efecto de entrada y salida permanente de las pantallas de parte de los actores”.

La obra, que cuenta con la dirección coreográfica de Leandro Nimo, cuenta las peripecias de “tres viejas amigas, una de ellas, es Pía, la que caracterizo yo”, revela Zalazar. “Son Pía, Rosa (Cinzia Soprano) y Blanca (Miriam Rotter). Pía las convence para viajar a Europa. Se animan a hacerlo y surge el tema de ‘viajaré al fin!’ Es conocer un mundo nuevo, ya de grandes. Varias de las canciones tienen que ver con eso, que nunca es tarde para lograr los sueños”, explica el director.

Leandro Zalazar, en el centro de la escena protagonizando «Pipo», el musical de su autoría.

La idea le surgió a Leandro a partir de una experiencia personal y familiar. “Habíamos hecho un viaje con mi abuela y uno de los personajes, Blanca, está inspirado en ella y está dedicada a ella. Por otra parte, mi madre tiene un grupo de amigas que suele viajar a Europa. En uno de esos viajes, ellas contaron anécdotas muy divertidas. ‘Qué bueno estaría escribir sobre unas amigas que se van de viaje’, me dije inmediatamente. Ese fue el disparador de la obra, pero la inspiración fue mi abuela”, cuenta este joven director, productor, escritor y actor .
Respecto de cómo fue creciendo esta idea, Zalazar reconoce que “la obra fue tomando varios giros. Empecé a escribirla hace mucho y en el transcurso fueron agregándose cosas. En un principio, no iba a ser un musical. Pero después de que pasé por loa experiencia n de ‘Pipo’ se me dispararon un montón de ideas. En ‘Pipo’ las pantallas estaban, pero no como un recurso fílmico, era más una cuestión escenográfica. Se me ocurrió que se podía aprovechar. Yo venía haciendo todo comedia, pero probé con el musical y me encantó”.
En cuanto a las postales de viaje,

Una escena de «Sobreturno», actuada y dirigida por Leandro Zalazar.

en un principio las cosas también iban a ser más bien simples. “Eran las tres mujeres sobre el escenario con un video mapping de la torre Eiffel y cosas que podía sacar de internet”, cuenta.
Pero la ambición artística de Salazar lo impulsó a otra dimensión. “Me motiva muchísimo la posibilidad de cumplir sueños dentro del teatro. Cada obra, cada proyecto es como soñar, volar, imaginármelo y poder llegar a concretar eso que con tanto esfuerzo y pasión uno va gestando. Lo más lindo es que se comparte con amigos y familia. Después aparece el desafío artístico que nos hace crecer”, sostiene.
Nueve personas en Europa durante un mes filmando escenas para un musical, ¿cómo es posible? “Se tenían que alinear bastante los planetas (risas)”, resume Zalazar. “Mi viejos (que son parte del equipo en viaje) están detrás de la logística y lo que es pertinente al viaje. Lo artístico es mio”.
Las redes sociales son parte fundamental de esa aventura. El grupo estará contando las vicisitudes europeas a través de devieja.blogspot.com y por Instagram y Facebook a través de @deviejaporelmundo. “Vamos a estar compartiendo backstage, experiencias y cosas que nos pasan. La idea es que la gente, el público, vaya conociendo la historia, metiéndose en la obra”.

Los protagonistas tienen un diario de viaje que puede seguirse en devieja.blogspot.com y por Instagram y Facebook a través de @deviejaporelmundo.


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