Dejó en el auto un maletín con 90.000 dólares y se lo robaron

NEUQUÉN (AN).- Un empresario que se movilizaba en un auto alquilado, estacionó y bajó a realizar un trámite en el área del microcentro neuquino. Dejó un maletín cubierto con ropas sobre el asiento del conductor.

Cuando volvió, una hora más tarde, el vidrio de la puerta del acompañante estaba roto y había desaparecido el maletín que contenía 90.000 dólares, con los cuales el hombre tenía planeado comprar un camión.

El hecho se produjo ayer entre las 11:30 y las 12:30 en la calle Independencia, entre Santa Fe y Córdoba de esta ciudad, frente a un sector del Parque Central donde está el museo Paraje Confluencia.

La víctima es un hombre que sería el dueño de una empresa de servicios petroleros que opera en Neuquén y Caleta Olivia, según confiaron fuentes policiales al ser consultadas por este diario.

«Es una persona de Neuquén que tenía que hacer unos trámites en la oficina de la Anses y como única precaución cubrió el maletín con una bolsa con ropas», informó ayer Carlos Brondo, jefe de la comisaría Primera, que investiga el caso.

«Cuando volvió, vio vidrios sobre los asientos y no estaba el maletín? Contra esto es muy poco lo que se puede hacer», agregó.

El dueño del maletín tenía previsto comprar un camión y para ello contaba con todo el dinero en dólares. Se movilizaba en un Chevrolet Corsa color blanco alquilado que estacionó en uno de los pocos lugares disponibles en esa parte de la ciudad que, sobre todo en ese horario, presenta un tránsito infernal.

Demoró algo más de una hora en la oficina pública. Cuando llegó al vehículo se llevó la amargura del año.

La Policía cree que el o los autores del robo no tenían la menor idea de cuál podía ser el botín, pero siempre un maletín resulta prometedor.

«El autor del robo se encontró con algo que no imaginaba, no creemos que haya sido algo planificado o que lo hayan seguido para robarle», agregó Brondo a este diario.

Descartó, en ese sentido, que se haya tratado de una «salidera» porque el hombre no había salido de un banco con el dinero. Al contrario, se cree que fue un robo «al voleo» con un inesperado beneficio para quien o quienes lo ejecutaron.

Las investigadores realizaron las pericias de rigor: buscaron huellas en la puerta y los restos de vidrio, tomaron fotografías del rodado y levantaron testimonios en la zona donde se produjo el hecho.