La Plata de ellos vale más: un VAR que ve hormigas en vez de elefantes

Estudiantes fue perjudicado contra Athletico Paranaense y otra vez beneficiaron un equipo brasilero en los torneos de Conmebol.

Cuando hay polémicas y discusiones para los dos lados, el fútbol va por carriles más o menos normales. Pero se suceden en Sudamérica en los últimos años, arbitrajes que, mediante el VAR, encuentran siempre la forma de favorecer a los equipos brasileños.

Ya de por si los planteles de Brasil tienen jugadores de nivel europeo y el país pentacampeón del mundo tiene hoy los mejores equipos en calidad individual y colectiva.

Estudiantes de La Plata hizo un esfuerzo enorme en la serie de cuartos de final de Copa Libertadores. Luego de empatar la semana pasada sin goles de visitante, logró un gol legítimo por intermedio de Luciano Lollo, que capturó un rebote en el palo y anotó el tanto que significaba la clasificación para los de Ricardo Zielinski.

Sin embargo, primero los responsables del VAR y después el juez Andrés Matonte, de Uruguay, juzgaron como posición adelantada la presencia de Jorge Morel en el área chica. Con un llamativo apego al reglamento, el juez cobró fuera de juego del paraguayo, que no interfirió en la jugada pero estaba cerca del arquero rival.

Según el reglamento, no alcanza con estar en posición adelantada, sino con impedir que el guardameta tenga capacidad de reacción. Si bien es una jugada de interpretación, la balanza se inclinó para el mismo lado que en los últimos años. Los perjudicados nunca son brasileños.

Para colmo, cuando la serie se iba a penales, en la última jugada del partido Paranaense llegó al gol con un cabezazo de Vitor Roque, tras una gran acción de Vitinho. El tanto fue revisado por el VAR porque Roque le gana el balón aéreo a Mariano Andújar y la pelota le pega en el hombro.

La publicación del presidente de Estudiantes, Juan Sebastián Verón, en Instagram contra Conmebol.

Cuando el VAR llegó al fútbol, quienes defienden la utilización de la tecnología argumentaron que la idea es “encontrar elefantes y no hormigas”.

En otro contexto se pueden considerar dos jugadas polémicas y nada más, pero la sensación en gran parte del público sudamericano es que cuando hay un equipo brasileño del otro lado, las hormigas siempre aparecen a favorecer a los que vienen de ese país.


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