Encuentran muerta a la joven buscada en Miramar

MIRAMAR (DyN)- La adolescente Natalia Melmann, desaparecida hace cinco días en Miramar, fue encontrada ayer sin vida en una zona de los bosques que pueblan el vivero Florentino Ameghino de esta ciudad bonaerense, en avanzado estado de putrefacción y semidesnuda.

El fiscal Marcos Pagella, señaló que el cuerpo fue hallado “boca arriba” cerca de las 8 por un niño que paseaba su perro en el vivero, con señales de haber sido “arrastrado”.

Distintos testimonios permitieron a la policía elaborar el identikit de quien es el principal sospechoso: se trata de un hom-bre de entre 32 y 36 años, de ojos castaños, tez morena y cabello oscuro, robusto, de 1,80 metro y unos 80 kilos.

Los investigadores presumen además la participación en el hecho de otras dos personas, de las cuales ya tendrían también identikits, y estiman que el cuerpo fue llevado a ese lugar ayer a la mañana: por eso se tomaron muestras del terreno, para determinar si coinciden con las del cadáver.

La autopsia que se le practicó anoche reveló que la joven falleció “estrangulada” por el cordón que tenía atado a su cuello y que debajo de las uñas presentaría “rastros de piel”.

Así lo confirmó a DyN el fiscal general adjunto de Mar del Plata, Juan Manuel Pettigiani, quien indicó que el cadáver de Natalia presentaba un cordón anudado a su cuello en el momento en que fue hallada.

“La chica tendría rastros de piel debajo de sus uñas” dijo el fiscal, lo que confirmaría la hipótesis de un ataque y una defensa por parte de la menor.

El fiscal utilizó el potencial, ya que su información -dijo- “era preliminar”, pues la necropsia no había finalizado pasadas las 23.

Pettigiani también informó que “aparentemente tuvo un ataque sexual”, aunque evitó usar la palabra violación porque las pericias no habían terminado.

Natalia había desaparecido en la mañana del domingo luego de haber ido en la noche del sábado a un boliche ubicado en la zona del muelle de Miramar, llamado Amadeus, y de haber asistido al bar La Cantina, que se encuentra precisamente en la zona lindante con el inicio del vivero.

La última persona que vio a Natalia fue Gustavo Fernández, de entre 30 y 35 años, quien aseguró que un patrullero paró junto a la joven y luego siguió su marcha tras un breve diálogo.

En su declaración ante la justicia, los dos policías que estaban en el patrullero señalaron que le preguntaron a la joven por un auto que se había dado a la fuga tras un accidente de tránsito y que luego siguieron su marcha.

Tras el hallazgo del cuerpo, el fiscal general adjunto de Mar del Plata, Juan Pettigiani, señaló que el gobierno bonaerense extendió al caso de Natalia la recompensa de 100.000 pesos para quien entregue datos fehacientes sobre su muerte, lo cual rige para los cinco casos de jóvenes estranguladas en Mar del Plata.

El padre de la joven, Gustavo Melmann, declaró ayer en Miramar y luego fue trasladado a la Morgue Judicial de Mar del Plata, donde se encontraba el cadáver de su hija.

A partir de las 20, familiares y vecinos de Miramar llevaron adelante una marcha de silencio desde la intersección de las calles 21 y 28 hasta la costa, para reclamar el esclarecimiento de la muerte de Natalia. En su marcha apedrearon la comisaría y fueron reprimidos con gases lacrimógenos.

A un baquiano le prohibieron ir al vivero

MIRAMAR (Télam).- Un baquiano dijo ayer que la zona en la que apareció el cadáver de la adolescente Natalia Melman, en el Vivero Municipal, ya había sido registrada por él días atrás, y que ayer la policía no le permitió volver a inspeccionarla, sino que le pidió que se fuera a 20 kilómetros de allí.

El hombre, que se identificó como Bernardo Olguín, habló con los periodistas en el Vivero Municipal luego de que un chico de 10 años encontrara bajo unas ramas el cuerpo de Natalia, quien estaba desaparecida desde el domingo último.

Explicó que el lugar ya lo habían revisado el primer día de búsqueda, y que ayer, cuando fue a buscar sus caballos, la policía le prohibió que estuviera en el lugar y le indicó que él y sus acompañantes fueran a rastrillar en Mar del Sur y Centinela del Sur, a más de 20 kilómetros de Miramar.

Estas directivas policiales fueron consideradas por el baquiano como “muy extrañas”.

Olguín encabezaba un grupo de jinetes que buscaba a la muchacha por los campos cercanos a la ciudad balnearia.

El fiscal Marcos Pagella, por su parte, le dijo a los periodistas que el cadáver estaba con la misma blusa levantada y el pantalón y la bombacha a la altura de las rodillas, y que debido al avanzado estado de descomposición en que fue hallado no se podían notar signos de violencia.

El funcionario judicial añadió que por esa razón el padre de la chica, Gustavo Melman, reconoció a su hija por las prendas que vestía.

El cuerpo fue trasladado a la morgue de Mar del Plata, ubicada a cinco kilómetros del centro marplatense, donde a las 19 los médicos realizarán la autopsia.