Cerdá: “Para lograr la productividad de un pozo de Vaca Muerta hay que hacer 10 en el convencional”
El ministro de Hidrocarburos de Chubut, Martín Cerdá, aseguró que no se pueden comparar el convencional con Vaca Muerta por su productividad. Destacó el sostenimiento de la producción y contó los avances en la exploración de D-129.
Chubut mantiene su producción estable y sueña con el avance del no convencional.
“Comparar el convencional con Vaca Muerta es como comparar peras con manzanas”, aseguró el ministro de Hidrocarburos de Chubut, Martín Cerdá, en respuesta a la supuesta competencia con el desarrollo del shale neuquino que se denuncia desde los gremios chubutenses. Y planteó que “la producción viene hace años en niveles de sostenimiento que no es nada menor”.
La rivalidad, la grieta o el Boca-River es una tendencia que suele permearse en múltiples ámbitos del país. Y precisamente desde los gremios petroleros de Chubut se ha cuestionado que las empresas retiran equipos o inversiones del convencional para centrarse en Vaca Muerta.
Para el ministro Cerdá la situación no es así y “no amerita una comparación, primero porque estamos produciendo hidrocarburos de diferentes reservorios, uno es no convencional y acá seguimos produciendo del convencional”.
“Y por el otro lado, la productividad que tiene un pozo de Vaca Muerta, porque en la cuenca del Golfo San Jorge hay que perforar casi 10 a 12 pozos para lograr la misma productividad de un pozo de Vaca Muerta”, remarcó.
Sin embargo, Cerdá reconoció que sí existen algunas dificultades en lo que hace a la operación de equipos especiales. “El país está atravesando una situación complicada ante la falta de equipos, hay mucha demanda en Vaca Muerta y posiblemente entra aquí lo que los gremios se quejan que todo va para Vaca Muerta, pero es un tema macro de la industria que hay que ver cómo se trabaja a futuro par resolverlo”, planteó.
La estrechez de los equipos de perforación, fractura y completación se agravó en los últimos meses a raíz de las trabas a las importaciones que padecen las empresas del sector y que les imposibilitan reparar muchos de estos equipos, generando algunos traslados en el país.
En tanto que Cerdá destacó que no solo Vaca Muerta es un desarrollo positivo para toda la industria, sino que también su conocimiento y desarrollo puede ayudar a agilizar otras cuencas no convencionales, como es el caso de la exploración de la formación D-129 en Chubut.
El ministro de Hidrocarburos de Chubut remarcó que “estamos teniendo una actividad sostenida en producción. Esta es una cuenca madura, convencional, pero así y todo los niveles de producción se vienen sosteniendo desde hace 3 ó 4 años”.
“Hoy estamos con 22.500 metros cúbicos días de producción– unos 141.500 barriles por día- de la cual seguimos exportando el 30% y por los años que lleva en producción la cuenca no es un número para despreciar, ni tampoco ante el potencial de Vaca Muerta”, planteó.
El petróleo de tipo Escalante es la estrella de la zona y explica que la producción no muestre el mismo declino que en otras cuencas. “Es un petróleo pesado 24 grados API, que se necesita para hacer la mezcla con el hidrocarburo liviano que se produce en Vaca Muerta y por la calidad, porque es un petróleo con bajo contenido de azufre, es utilizado para hacer combustibles más sustentables y por eso es requerido también para la exportación”, señaló Cerdá.
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