Estatales de Neuquén resistirán la desindexación de los salarios

Desindexar la economía para permitir que baje la inflación es una de las propuestas con las que llegó el gobierno nacional que asumió el 10 de diciembre, pero los sindicatos estatales de Neuquén no tienen intenciones de desacoplar sus salarios de la suba de precios el año que viene.

Luego de tres años de aumentos automáticos atados al Índice de Precios al Consumidor (IPC), los principales dirigentes gremiales de la provincia se mostraron conformes con los resultados que dio la fórmula y adelantaron que pedirán mantenerla en la negociación del 2020.

“Creemos que si en estos últimos años se logró un acuerdo que dio previsión en el tiempo, la lógica sería no cambiarlo ahora, a lo sumo ajustar algún aspecto de la metodología. Nada indica que el contexto inflacionario vaya a mejorar rápidamente”, aseguró ayer Carlos Quintriqueo, secretario general de ATE.

El dirigente indicó que están a la espera de la última actualización trimestral que se aplicará sobre los salarios de enero, aunque aseguró que la suba anualizada no bajará del 55%. “En febrero esperamos estar sentando nuevamente las bases de la discusión”, planteó.

Algo similar evaluó el titular de ATEN, Marcelo Guagliardo, quien adelantó que tratarán “que se mantenga la cláusula de actualización automática” por inflación. “Nos permitió cubrirnos del proceso inflacionario que nada hace pensar que vaya a resolverse muy rápidamente. Mantenerla es un objetivo que esperamos que no se frustre”, aclaró.

Al igual que el sector estatal, el docente recibirá la última cuota de aumento salarial en febrero, con los haberes de enero, por lo que a partir de allí debería iniciarse la negociación salarial para el 2020. Guagliardo pidió que se haga una convocatoria con anticipación para que el ciclo lectivo pueda iniciarse el 2 de marzo “que es cuando tiene que empezar”.

La discusión por la indexación de salarios, que significa desacoplar aumentos de inflación, quedó planteada por el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, al argumentar la suspensión de la fórmula de movilidad jubilatoria en la ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva.

El funcionario fundamentó que, con el actual mecanismo, los jubilados “no ganan nada” en términos reales si es que sus haberes están atados sólo al proceso inflacionario. La pregunta es si ese esquema de “desindexación” también repercutirá en las provincias o elegirán seguir con los criterios adoptados hasta ahora.

“No creemos que sean los salarios los que generen inflación. La provincia debería tener libertad para resolver sus negociaciones en función de proteger los salarios de sus trabajadores”, evaluó Guagliardo. Desde ATE, también Quintriqueo pidió que la gestión de Omar Gutiérrez “siga teniendo autonomía para discutir” y se mostró en desacuerdo con la postura planteada por la CGT respecto de congelar subas y aplicar, en cambio, una suma fija en los próximos seis meses.

En el sector judicial, el titular del Sejun, Edgardo Chervabaz, también ponderó la actualización salarial atada a la suba de precios aunque anticipó que pedirán cambios para hacerla bimestral, en lugar de trimestral.

El Poder Judicial acordó un aumento del 34% en cuatro cuotas este año más una cláusula que permite compensar las subas pactadas con el porcentaje que arroje el IPC en cada trimestre.

La reapertura de la paritaria nacional docente anunciada por el nuevo ministro de Educación, Nicolás Trotta, generó expectativas en el gremio docente de Neuquén.

El secretario general de ATEN, Marcelo Guagliardo, dijo que el espacio de negociación “necesariamente va a traer compromisos de Nación para colaborar con el presupuesto de las provincias” y añadió que esperan “que haya mejoras en el Fondo de Incentivo Docente (Fonid)”, una compensación que aporta Nación a los salarios de los maestros de todo el país.

La paritaria nacional docente se había creado en 2005 con la sanción de la ley 26.075 de Financiamiento Educativo pero fue derogada por el gobierno de Mauricio Macri en 2018.

Uno de sus objetivos era fijar un salario mínimo docente para igualar las condiciones en todas las provincias.

Guagliardo se mostró optimista en que también pueda discutirse en ese espacio el financiamiento para obras de infraestructura escolar, pues aseguró que “en los últimos cuatro años fue prácticamente nula”.

El gobernador Omar Gutiérrez se garantizó tres años de moderada estabilidad con los sindicatos estatales cuando implementó las subas salariales atadas a la inflación. El mecanismo tardó un tiempo en aceitarse, al principio los gremios lo miraron con recelo, pero ahora nadie quiere soltarlo.

¿Repetirá el esquema en la discusión de febrero o adoptará la estrategia de Alberto Fernández para empezar a “despegar” sueldos de la suba de precios? En una reunión con las CTA y la CGT, la propuesta oficial del nuevo gobierno fue suspender las negociaciones paritarias por seis meses a cambio de una suma fija. Si ese es el camino que se adopta, a Gutiérrez le tocará elegir un lado. El de la autonomía podría ser también el de la paz social.