Ultraprocesados y químicos fuera del cuerpo para lograr un sistema inmunológico equilibrado

Serie "Bienestar Yo Como": Cuáles serían los hábitos saludables a seguir para lograr una condición óptima.

El sistema inmunológico está formado por células, órganos, componentes celulares, humorales y también componentes metabólicos. En el interviene el sistema nervioso central. Todo el conjunto de células y todo el conjunto de órganos trabaja intentando equilibrar el proceso inflamatorio. ¿Cómo mantenerlo equilibrado?, ¿qué hábitos incorporar?, ¿qué alimentos mejoran las condiciones?

El doctor Diego Puebla, nació en Cultral Co, pero desde hace algunos años vive en España y está dedicado a ejercer la medicina integrativa. Desde su mirada sistémica nos ayuda a comprender la importancia de lograr un sistema inmunológico equilibrado.

Alimentarse de manera saludable y el ejercicio ayudan a mantener el sistema inmunológico protegido.


“Uno de los objetivos más importantes del sistema inmunológico es controlar los procesos inflamatorios, ya sea por una causa infecciosa, por una causa traumática, por un estrés crónico, por una enfermedad autoinmunitaria, o por una enfermedad maligna como el cáncer, etc. El sistema inmunológico en equilibrio es aquel que puede gestionar las inflamaciones de una manera eficaz y eficiente, transformando una enfermedad aguda en una enfermedad que se ha resuelto y no transformando a una enfermedad aguda en una enfermedad crónica”, explica Puebla.

Para mantener el equilibrio del sistema inmunológico es importante tener todas las herramientas necesarias y así los sistemas inflamatorios puedan funcionar de manera eficaz y eficiente. Esto no significa que no nos vamos a enfermar, significa que nos vamos a enfermar de enfermedades congruentes que son las propias estacionales y que las vamos a resolver con el menor gasto posible. Esa sería una demostración de tener el sistema inmunológico equilibrado.

El descanso, el ejercicio físico, la meditación, la restricción de calorías como el ayuno intermitente son disciplinas probadas que traen muchos beneficios tanto a nivel general como a nivel inmunológico. “El vínculo entre la alimentación y el sistema inmunológico es un vínculo directo, ya que nuestro sistema inmunológico, la mayor carga de células y de mediadores inflamatorios los tiene el intestino. La antigua medicina china hablaba del intestino como el segundo cerebro, por la cantidad de neuronas que tiene. Entonces, viéndolo desde el punto de vista fisiológico, el vínculo que existe entre el sistema digestivo y el sistema inmunológico puede estar directamente afectado, o resuelto, a través de nuestros alimentos”, comparte el especialista.

Para alcanzar ese proceso antinflamatorio necesitamos tener los hábitos saludables básicos resueltos, como un buen descanso, una alimentación lo más natural posible, libre de ultraprocesados, libre de químicos, libre de tanto maltrato. Necesitamos hacer ejercicio físico al menos tres veces por semana, ya sea de tipo aeróbico, de carga muscular o en peso. Necesitamos también tener un buen control psicoemocional, meditar, encontrar una calma mental antes de tomar decisiones de vida”.

Diego Puebla, médico.

El cambio de hábito es fundamental. Luego de hacer una recomposición de la microbiota intestinal, habiendo regulado el sueño y habiendo regulado el ejercicio físico, hacer la terapéutica con probióticos, con reducción de alimentos proinflamatorios y con un buen control del sistema nervioso central, con una buena regulación emocional, sería la manera de compensar los daños inflamatorios que tenemos.


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