Gauchito Gil, homenajeado a la vera de la Ruta 7

Oscar Livera

VISTA ALEGRE (ACE).- Miles de devotos se congregaron ayer en el santuario que sus seguidores edificaron en el ingreso a Vista Alegre al Gauchito Gil, a un costado de la Ruta 7.

En varios paradores a lo largo de la ruta, señalados con banderas y banderines rojos, los creyentes en los milagros del gaucho correntino se apostaron para homenajearlo en un aniversario de su muerte a mano de los soldados en 1878.

Gauchos de a caballo, hombres y mujeres con sus hijos dispuestos a pasar una mañana o el día, se volvieron a reunir en el ritual de saludar, agradecer o hacer una promesa a cambio de salud o la sanación de una dolencia.

“Son miles los promesantes que vienen para acá, el año pasado fuimos 7.000 y este año creo que seremos la misma cantidad”; dijo Héctor Ibacache, uno de los integrantes de la comisión organizadora de la actividad.

Ibacache es de Neuquén y a las 10 ya estaba en marcha el asado de una vaquillona, que se compartiría con los devotos que estuvieran en el lugar. La comisión organizadora, integrada por capitalinos, vecinos de Centenario y de Vista Alegre, se ocupó de coordinar la llegada en las primeras horas y de distribuir los espacios, incluido el pago de algunos puestos.

La municipalidad de Vista Alegre dispuso de baños químicos y el sonido de un escenario, mientras que la policía de tránsito se ocupó de resguardar el paso de vehículos, camionetas y maquinaria pesada en la zona, con mucho camión de transporte petrolero hacia Loma de la Lata en estos días.

Hasta una ambulancia y un pelotero para combatir el aburrimiento de los más chiquitos había ayer en el lugar.

Además de este descanso a la vera de la ruta, en la zona de Centenario había otro a un costado de la multitrocha a Neuquén pero en las inmediaciones del picadero, con menor afluencia.

En el cruce de Vista Alegre no sólo se apostaron los seguidores del Gauchito, sino que vieron su oportunidad los vendedores ambulantes, choripaneros y artesanos varios.

Aunque la comisión organizadora se ocupó del evento los últimos cuatro años, hay familias que aseguraron realizar el mismo rito desde hace seis y siete años en el lugar. Algunas personas llegaron caminando de Centenario o de Neuquén, como parte de sus pedidos de un milagro.

Según explicaron, un devoto de Neuquén que hizo una promesa en Mercedes (Corrientes), le edificó un descanso al Gauchito cuando le cumplió su milagro de sanación.

Las actividades de permanencia organizada en el lugar y cantos sobre el escenario se preveían hasta las 18, tras lo cual se desmontaron puestos, sonido y los sanitarios sobre la ruta.

Los devotos se acercaron a encender velas para pedir o agradecer.