Granjas Patagónicas logró envasar el sabor de Bariloche
Hay cosas ricas para todos los gustos y al turista le cuesta decidirse entre las salsas, las especias, los tés, las mostazas y los ahumados, pero para los que vivimos acá, Granjas Patagónicas es una referencia cotidiana para disfrutar.
Están a mano en la fábrica (Arnaudo 79, en Ñireco), en el local del aeropuerto o en el paseo de compras de la chocolatería Del Turista, pero sus delicias se pueden conseguir también en supermercados y almacenes.
Lo que comenzó como un ahumadero de trucha, ciervo y jabalí, tiene hoy una cantidad asombrosa de productos.
Vale la pena asomarse a sus sabores. Una vez que se conocen, se hacen indispensables.
Comentarios