Jara, héroe y villano según las camisetas

Para algunos es un héroe, para otros un villano: el chileno Gonzalo Jara se convirtió en el gran protagonista de la Copa América después de que las imágenes de su polémica provocación a Edinson Cavani dieran la vuelta al mundo. Chile festejó su pase a semifinales del torneo continental por primera vez en 16 años, pero lo que realmente marcó el partido jugado en la noche del miércoles entre el equipo local y Uruguay fue la acción de Jara, que metió un dedo en el trasero de Cavani antes de que éste reaccionara dándole una leve bofetada en la cara. El uruguayo fue expulsado al ver su segunda tarjeta amarilla cuando aún faltaba media hora de partido, en el que Chile logró el 1-0 en el minuto 80. La indignación uruguaya apuntó no sólo al árbitro brasileño Sandro Ricci, sino sobre todo al defensor del Mainz, de Alemania, un hombre sonriente y de perfil bajo que nunca hasta hoy había destacado en el elenco dirigido por Jorge Sampaoli. Su tocamiento a Cavani lo trasladó al primer plano y lo descubrió como un jugador de artimañas. En las redes sociales y webs de medio mundo se extendió la imagen de otro duelo con el uruguayo Luis Suárez en marzo de 2013 por eliminatorias mundialistas, donde el chileno parece que toca los genitales del atacante “charrúa” antes de que éste le lance un puñetazo. Nadie resultó castigado por aquella acción, que pasó inadvertida para el árbitro y para la opinión pública. La Copa América, sin embargo, es otro escenario. “Con este muchacho ‘jarita’, habrá que ‘hablar’ cuando nos crucemos por el mundo!”, amenazó el hasta hace poco capitán de la selección uruguaya, Diego Lugano, desde su cuenta de Twitter. “Esperemos que la Conmebol actúe de oficio como con Suárez anteriormente”, exigió el actual capitán, el defensa Diego Godín, que recordó así que el delantero del Barcelona no estuvo en la Copa América de Chile porque la FIFA lo castigó con nueve partidos de suspensión por morder a un rival en el Mundial de Brasil, una acción que tampoco vio el árbitro. Por su parte, la defensa de Cavani esperará el informe del árbitro y los veedores de la Conmebol para decidir los pasos a seguir. Alejandro Balbi, abogado y secretario general de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), declaró medios de Montevideo que “no se va a hacer nada hasta no tener el informe confidencial”. “Después de leerlo y estudiarlo actuaremos en consecuencia”, dijo Balbi, y afirmó que “lo que pasó (en el partido) está a la vista de todo el mundo”. A la espera de una posible sanción, medios chilenos criticaron “la hipocresía charrúa”, como escribió hoy el diario “La Tercera”, pues aseguran que “fueron ellos (los uruguayos) quienes inventaron la picardía, la provocación”. “De qué se quejan los uruguayos si son junto a los argentinos los que inventaron estas mañas”, aseguró por su parte Hernán Godoy, exfutbolista y entrenador de fútbol chileno, al diario “La Nación”. Suárez reaccionó indignado en su cuenta de Twitter: “A los que hablan de que Uruguay juega mal, pega, discute, etc., que recuerden que Uruguay tiene 15 Copas América. Así que los que se quejan, que miren por su país, que no tienen ningún título”, lanzó, en una clara alusión a Chile. Mientras, en Chile los fans se divierten con los “Jara facts”, donde se ensalza la picardía del defensa de 29 años. “Argentina tiene ‘la mano de dios’, Chile los dedos de Jara”, escribió un usuario de Facebook. El chileno mantiene silencio, arropado por su equipo. El defensor del Mainz alemán es un hombre tranquilo, sin Twitter y procedente de una ciudad de provincias del sur de Chile, Hualpén, donde la mayoría de sus habitantes son campesinos de pocas palabras. Desde allí, el jugador saltó al Colo Colo, luego a Inglaterra y finalmente a Alemania, donde actúa desde al año pasado. No obstante, Jara tiene una personalidad risueña. En 2011 fue uno de los cinco involucrados en el escándalo del “Bautizazo”, como se llamó en Chile al acto de indisciplina que protagonizó junto a Carlos Carmona, Jean Beausejour, Jorge Valdivia y Arturo Vidal. Todos fueron acusados por el entonces técnico Claudio Borghi de haber llegado a la concentración 45 minutos tarde y en un estado “indefendible e inadecuado para un deportista profesional”, es decir, ebrios. Los cinco alegaron que habían estado en el bautizo de uno de los hijos de Valdivia. Ahora se enfrenta al juicio en solitario.

AP

La expulsión de Cavani fue determinante en el desarrollo posterior del partido que ganó Chile.

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