Jonathan Font llevó sus goles del Valle Medio a las Antillas Holandesas

Jugadores que recorren el mundo hay muchos. Goleadores, no tantos, y quienes acumulan récords son aun menos.

Iban 36 segundos de partido cuando Jonathan Font anotó el 1-0 de su equipo, RKSV Scherpenheuvel, en la goleada ante el SV Undeba. ‘‘Fue de un pelotazo de mitad de cancha. La baja mi compañero de cabeza dentro del área y la agarré de volea’’, contó el oriundo de Choele Choel a Río Negro sobre su debut hace un par de días.

No fue el único, porque cinco minutos más tarde anotó el segundo y a los 25’ de la primera parte marcó el tercero. De su mano, el Scherpenheuvel liquidó rápido el pleito y el entrenador lo sacó en el entretiempo para tenerlo en condiciones en la continuidad del certamen de primera en Antillas Holandesas.

La prolífica carrera en el fútbol del ascenso norpatagónico y la gestión de un representante que lleva jugadores al exterior,le abrieron este horizonte a miles de kilómetros de casa. ‘‘Por ahora estoy solo pero la llevo bien. En unos meses viene mi novia. El clima es caluroso y es un lugar turístico’’, explica sobre Curazao, la ciudad donde vive.

El delantero la rompió toda en Independiente de Río Colorado, con un promedio de gol altísimo y dejando una gran imagen en lo personal. ‘‘De Independiente muy lindos recuerdos, la verdad que la gente de la ciudad se porto muy bien conmigo . Muy agradecido al club’’, comentó.

Con Jorge Lencina como entrenador, el atacante empezó a hacer ruido a partir de sus goles en el Federal B en el Rojo. Tras su paso por Sportsman de Choele Choel, disputó el Regional Amateur con Boxing de Río Gallegos, también con el Pulpo como técnico. Allí llegaron hasta la final contra Círculo Deportivo de Nicanor Otamendi.

En reiteradas ocasiones su apellido se probó para reforzar a Cipolletti, pero finalmente no se dio la llegada. Su último club en Argentina fue la Unión Deportiva Catriel, donde en un puñado de partidos demostró toda su calidad. Anotó varios goles en la etapa regular del Clausura 2019 de la Liga Deportiva Confluencia. La Depo no logró clasificar a cuartos de final, pero los fanáticos del fútbol del alto valle pudieron verlo en las canchas.
‘‘Estuve un par de meses. Fueron 10 goles en siete partidos’’, dijo Jonathan sobre su estadía en Catriel.

El caso de Font es testigo porque no necesariamente hay que ir lejos para encontrar jugadores de jerarquía. Se trata de darles la oportunidad de jugar, brindarle condiciones para que puedan desarrollar su fútbol y mostrar todo lo que saben. Cada mercado de pases es un desafío para los clubes zonales en las distintas categorías: Federal A, Regional Amateur y ligas locales. Abrir los ojos para agudizar el ingenio es una tarea difícil pero necesaria.

Font se ganó una oportunidad en el exterior porque hizo muy bien las cosas en ambiente de origen, tanto dentro como fuera de la cancha. Desde aquellos primeros años, cuando era un pibe en Choele y luego se mudó en la adolescencia a Luis Beltrán, dejó siempre una gran impresión con sus goles y la humildad que lo caracteriza. Este hincha de Boca fanático del fútbol, de 26 años,tiene dos más de contrato y pretende seguir creciendo.

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*por Jorge Tanos, corresponsal de »Río Negro» en Río Colorado.

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Jonathan Font tuvo un recordado paso por Independiente de Río Colorado durante la temporada 2017 bajo las órdenes de Jorge “Pulpo” Lencina, donde fue alternando su participación en el torneo local y el Federal B.
El jugador de Valle Medio dejó una buena imagen de compañerismo con sus pares, el cuerpo técnico, los directivos del club, incluso entre sus adversarios.

Durante ese año, Font pernoctó en las instalaciones del Rojo y estuvo siempre predispuesto al trabajo. Incluso hoy, con el paso del tiempo, la dirigencia de la institución guarda entre los recuerdos del club gratos momentos de Font, un lugar selecto para los jugadores que llegaron en algún momento a reforzar el primer equipo.

En esa temporada vistiendo la camiseta roja estuvo en la cúspide de la tabla de goleadores de la liga hogareña y en los 11 partidos jugados en el torneo nacional, marcó 18 goles (un promedio de 0,61% por encuentro).