Inteligencia artificial en los procesos judiciales: Río Negro es pionero a nivel nacional

La aplicación de la Inteligencia Artificial en los procesos judiciales dejó al Poder Judicial de Río Negro en la escena nacional con el dictado de los primeros seis mil fallos. La política pública forma parte de un desarrollo propio y está pensada para procesos repetitivos ya que preserva el rol de los empleados y jueces para tareas humanas, que jamás serán reemplazadas por el algoritmo.

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La noticia sobre el dictado de los primeros seis mil fallos con Inteligencia Artificial se coló en la agenda nacional: ayer varios medios nacionales se hicieron eco del avance tecnológico para las resoluciones que imprimió el organismo de justicia. Es que el de Río Negro es el primer Poder Judicial del país en aplicar este tipo de desarrollos para el dictado de sentencias.

La implementación del sistema tuvo su estructura en la digitalización absoluta de todos los expedientes, proceso que se aceleró con la pandemia.

Luego, gracias a la intervención del Centro de Planificación Estratégica, organismo encargado del diseño e instrumentación de las reformas, se advirtió que la mitad de los expedientes del fuero Civil correspondían a causas en la que el Estado es parte, como actor o demandado.

Entonces el Superior Tribunal de Justicia implementó el fuero Contencioso Administrativo, que estaba previsto en la Constitución. Hubo una primera prueba piloto en Viedma, luego en Roca y finalmente en Cipolletti. En Bariloche están en marcha los concursos ante el Consejo de la Magistratura.

Dentro del fuero Contencioso Administrativo, el 80 por ciento de la causas corresponden a ejecuciones fiscales de la Agencia de Recaudación Tributaria y de los municipios. Se trata en su mayoría de deudas de la ciudadanía que los entes recaudadores ejecutan para poder cancelarlas.

En esas causas, la Gerencia de Sistemas del Poder Judicial advirtió que se realizaba un trabajo repetitivo que consistía en corroborar manualmente el certificado de deuda y los datos de las personas: documentos, Cuil, denominaciones catastrales, lotes, períodos adeudados.

Entonces se desarrolló una plataforma con aplicación de Inteligencia Artificial para realizar todos esos controles que, en horas personas, demandaban mucho tiempo.

“Lo que se le exige al Poder Judicial es celeridad en la resolución y este sistema le imprime una gran capacidad de respuesta”, advirtieron los desarrollistas. Además, en beneficio de los trabajadores y trabajadores del Poder Judicial, se preserva su tiempo para la realización de tareas humanas que nunca van a poder ser reemplazadas por la Inteligencia Artificial.

El fuero Contencioso Administrativo, por ejemplo, lleva el trámite de reclamos contra el Estado: daños y perjuicios por mala praxis en los hospitales, accidentes en las escuelas, amparos contra Salud Pública.

“El hecho de que las sentencias monitorias se resuelvan con Inteligencia Artificial permite al personal de los organismos ocuparse de los conflictos que sí necesitan la intervención humana”, sostuvieron.

En este desarrollo, la Agencia de Recaudación Tributaria de la provincia de Río Negro adaptó sus sistemas a la plataforma del Poder Judicial. Se espera que los municipios tomen decisiones en el mismo sentido.

Entonces, cuando se inicia una demanda se genera el expediente automático y la Inteligencia Artificial verifica los datos de los certificados de deudas para que coincidan con los de la persona demandada. Si se supera esa etapa, el sistema arroja un tilde verde para poder continuar hacia el dictado de la sentencia. Si se advierten errores, el tilde es rojo y se corrige por una persona humana.

El modelo de sentencias fue consensuado entre los jueces y la jueza del fuero Contencioso, lo mismo que la fórmula de regulación de honorarios.

En ese escenario, el Poder Judicial contabilizó unas seis mil sentencias automáticas dictadas con Inteligencia Artificial. En la etapa final, el juez o jueza revisa el contenido y firma el fallo.

El Poder Judicial de Río Negro convirtió el uso de la tecnología en una política de Estado y logra el reconocimiento a nivel nacional. Sus sistemas fueron solicitados por otros Poder Judiciales, ya que permite salir del esquema de licencias pagas, que son costosísimas y no permiten adecuaciones a las necesidades locales.

La firma digital, el expediente digital, la regulación de las audiencias virtuales y hasta una aplicación para celulares que permiten el seguimiento de expedientes les permiten a profesionales de la abogacía litigar desde cualquier lugar, sin necesidad de trasladarse físicamente.

No sólo acortan distancias sino que lo que se busca es mayor celeridad en la resolución de los procesos.
Para todas las aplicaciones, el Poder Judicial conformó un Comité de Informatización que se complementa con el trabajo de un grupo considerable de desarrolladores.

La primera experiencia en Inteligencia Artificial fue la habilitación de un Chatbot en la página institucional con procesamiento del lenguaje natural que permite interpretar preguntas y elaborar una respuesta ágil.

La digitalización absoluta permite además el acceso a la información pública, no solo de fallos, sino de estadísticas y contrataciones.

Aseguran que no tendrá impacto negativo en los puestos laborales

Uno de los primeros interrogantes que se elaboraron con la irrupción de la Inteligencia Artificial es qué impacto tendrá en el mundo laboral. ¿Es posible que reemplace al humano y recorte puestos laborales?
Fuentes del Poder Judicial aseguran que no es así y que la tecnología sólo viene a mejorar el servicio de Justicia y sobre todo a brindarle “mayor celeridad”, uno de los principales reclamos que tiene la sociedad con el Poder Judicial.

En este sentido, las fuentes consultadas sostiene que la AI es una herramienta al servicios de los empleados y funcionarios de justicia.

“En todo el proceso interviene funcionarios y jueces. El dictado de estas resoluciones sólo le imprime celeridad al proceso, pero no afecta a los puestos de trabajos. Es una herramienta complementaria,” indicaron desde el organismo.

Agregaron que el sistema se utiliza para procesos estandarizados, repetitivos y pocos calificados. “La IA suplanta esta tarea monótona y conserva al recurso humano para otras tareas de mayor complejidad”, agregaron.

La provincia también se incorporó al Bus Federal

A fines de junio, el Poder Judicial de Río Negro fue el primero en incorporarse al Bus Federal. Se trata de una plataforma de intercambio de información digital seguro, pensado primero para los Poderes Judiciales.

El desarrollo se realizó a través de la Junta Federal de Cortes y todas las provincias aportaron informáticos para avanzar de manera colaborativa.

Los primeros nueve Poderes Judiciales en sumarse intercambian oficios y demandas interjurisdiccionales.
Antes del Bus Federal, esos trámites se hacían a través de expedientes papel y eran enviados por correo postal. Podían llegar a demorar meses.

Hace unas semanas, se conoció que la Cámara Laboral de Cipolletti obtuvo una prueba documental a través del Bus Federal en contacto con un Juzgado de Paz de la provincia de Buenos Aires. El testimonio llegó en 20 días y aportó celeridad a la resolución del conflicto laboral. Sin la digitalización, los oficios y notificaciones dependían de los tiempos y posibilidades de los abogados que los diligenciaban.

La segunda etapa de este desarrollo prevé incorporar organismos externos como bancos, entes recaudadores, Afip y los registros públicos (automotor, antecedentes, comercio). De esta forma, todo el intercambio de oficios y requerimientos comenzará a producirse íntegramente digital y en un canal seguro. El tiempo también se mide bajo la fórmula costos – beneficios.