Laila Díaz pidió ir a otro penal porque vive “un infierno”

Con visibles dificultadas para caminar, ayudada por un bastón, Laila Díaz se sentó frente al juez Nicolás Repetto para contar su versión de la situación que atraviesa en el penal de Roca. “Es un infierno, hace años que me discriminan y me golpean”, explicó la trans, quien la semana pasada presentó una hábeas corpus. Y pidió que la cambien de penal. “Yo quisiera que se vayan ellas tres (Rosa Retamal y dos reclusas más) pero como sé que es imposible quiero irme a otro lugar, estar tranquila, ahí no tengo seguridad”, describió entre lágrimas.

El fiscal Marcelo Gómez coincidió con el defensor público Juan Pablo Piombo, en la necesidad de que le den un certificado único de discapacidad. El juez se tomará unos días para evaluar la situación y resolver qué es lo mejor para Díaz. Si Laila obtiene el certificado, deberá tener asistencia psicológica y psiquiátrica.

Laila aseguró que hace dos años que Rosa Retamal y dos convictas más, las vienen “persiguiendo” y “golpeando”. “Tuvieron que dividir en dos el penal para que no haya problemas. Al patio, que es un potrero, tenemos que salir en horario diferentes” explicó. El hábeas corpus presentado por la trans tiene como génesis la golpiza que denunció el pasado lunes 22 da agosto.

Retamal declaró ante el juez el pasado miércoles. En aquella oportunidad su defensor, Sebastián Nolivo, pidió que no la saquen de Roca porque allí “está realizando talleres”. Laila aseguró que no hay más talleres porque Retamal golpeó a la docente de cultura, que renunció. El lunes pasado declaró el responsable del penal de Roca, Cristian Vallejos. Este lunes lo hará Romina Tapia, condenada junto a Retamal a 20 años de prisión por un crimen en Cinco Saltos. Díaz cumple una condena de 30 años por homicidio.

“Rompieron el candado, se cruzaron y me atacaron. Tengo mucho miedo, me discriminan, incluso las celadoras; me tratan de hombre y de sicario”.

Laila Díaz, condenada a 30 años, alojada en el Penal de Roca.