Aumenta el boleto de colectivo en Bariloche y costará 158 pesos

El incremento es del 37,4% para todos los recorridos exceptuando las líneas turísticas al cerro Catedral y al Aeropuerto que tienen una suba mayor y precio diferencial.

Seis meses después del último aumento del boleto, el municipio de Bariloche decidió aplicar un nuevo ajuste tarifario en el transporte, que a partir del 1 de julio costará 158 pesos en todos los recorridos urbanos. Las únicas excepciones serán los viajes al aeropuerto y al cerro Catedral.

El intendente Gustavo Gennuso firmó ayer la resolución, horas antes de iniciar un viaje a Europa, y puso fin al proceso de revisión tarifaria que se había iniciado en abril con el pedido de la empresa Mi Bus -que pretendía llevar el boleto a 161,98 pesos- y que incluyó una audiencia pública realizada el 1 de junio, donde todos los oradores se manifestaron en rechazo de la suba.

Gennuso reseñó ese recorrido en los considerandos de la resolución, recordó la autorización prevista en el contrato con Mi Bus para imponer aumentos de tarifa en forma semestral, previo “análisis de costos”, y justificó la recomposición en este caso por “la necesidad de sostener el funcionamiento del servicio”.

Afirmó que la adecuación tarifaria a los nuevos costos de prestación del transporte urbano permite “garantizar el derecho a circular por la ciudad, igualando brechas sociales y ofreciendo nuevas oportunidades, puesto que es un medio de acceso a otros derechos constitucionales”.

Como ocurre desde el 1 de enero, los pasajeros podrán viajar a un costo de 115 el boleto solo hasta fin de mes. Desde ese día (si no se demora el ajuste del sistema SUBE) la tarifa saltará a 158 pesos. El aumento aprobado es de un 37,4%.

Los porcentajes son algo mayores en las rutas de mayor uso turístico. En el caso del viaje al Aeropuerto la suba será de los actuales 221 pesos a 320 pesos, un ajuste del 44,7%. En el recorrido de la línea 55, que va desde el centro hasta el cerro Catedral, tanto por la avenida Bustillo como por Pioneros, el boleto que hoy es de 349 pesos pasará a costar 510 pesos (aumenta un 46,1%).

A diferencia de lo que ocurrió en los dos años anteriores, esta vez el municipio no aprobó aumento escalonado, en dos etapas. Se descuenta entonces que el ritmo inflacionario llevará a la empresa a pedir un nuevo incremento antes de fin de año.

En 2022 hubo un accidentado proceso de revisión tarifaria (que incluyó impugnaciones y dos suspensiones de la audiencia pública) y que terminó en agosto, cuando el Ejecutivo municipal resolvió llevar la tarifa a 96 pesos a partir de ese mes y anticipó un segundo aumento a 115 pesos para el 1 de enero.

La autorización de la tarifa en Bariloche es una potestad del intendente, pero los dictámenes posteriores a la audiencia pública y el resto del expediente fueron evaluados el jueves por la Comisión de Seguimiento del Transporte, donde están representados también los concejales, el gremio UTA y la empresa prestadora. Ese día la comisión aprobó por mayoría la moción de “aconsejar” al Ejecutivo la adopción de una tarifa plana de 158 pesos.

Consideró que era la decisión apropiada, en razón de que “el país viene atravesando un proceso inflacionario que asciende a casi el 90% interanual, provocando una variación de costos a afrontar para llevar adelante el servicio”.

Ese párrafo pareció escrito hace varios meses, porque hoy el índice de precios al consumidor evoluciona a razón del 114% interanual.


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