Neuquén: el canal Necochea sigue recibiendo líquidos cloacales

Lo limpian pero no alcanza

NEUQUÉN (AN).- En el canal Necochea se continúan realizando “parches” para evitar que reciba líquidos cloacales que desbordan de la red de efluentes del Oeste, un problema de larga data. La Dirección de Recursos Hídricos y el Ente Provincial de Agua y Saneamiento realizaron ayer tareas de limpieza pero que son transitorias porque la planta de tratamiento de Hibepa, que debe contener el líquido excedente que termina en el pluvial, no está funcionando aun. Tampoco se comenzó con la construcción de una nueva colectora que permita atender la nueva y mayor demanda.

Desde hace casi dos años el canal Necochea, que pasa por un costado del Parque del Oeste, recibe los efluentes que desbordan de una cámara de registro, cuando el caudal de líquidos excede la capacidad de contención de los sistemas de captación y bombeo. El sistema cloacal del Oeste está saturado debido a la cantidad de nuevas urbanizaciones que se sumaron en ese zona de la ciudad, en los últimos tiempos.

El año pasado la Defensoría del Pueblo presentó un amparo y la Justicia ordenó al EPAS y a Recursos Hídricos realizar los trabajos necesarios para detener el derrame de líquidos. En junio de este año, el gobierno provincial comenzó a colocar una nueva red de cañerías de PVC que conducen los líquidos excedentes hacia una cámara ubicada sobre calle Crouzelles que está más descomprimida que el resto. En ese entonces se presentó también en sociedad la planta de tratamiento de Hibepa que estaba siendo acondicionada para ser puesta nuevamente en marcha.

“Río Negro” pudo constatar ayer que la planta aun no está en funcionamiento, pero todo el equipamiento está instalado y en los próximos días se realizará una prueba del sistema. La puesta en servicio de esta planta permitirá resolver transitoriamente el derrame de líquido, pero la solución final llegará con la colectora máxima del Oeste.

Mientras tanto, el canal continúa recibiendo líquidos sin tratar de una cámara, en la que se conecta un caño de PVC a través del cual se conducen los efluentes hacia el lecho del Necochea.

En el lugar el olor es fuerte, el color del agua pasa del verde oscuro en algunos lugares a un negro intenso en las zonas más críticas. Ayer una cuadrilla del EPAS y de Recursos Hídricos retiró un camión de agua, barro y algas podridas y despejó el curso de agua.

El Necochea es un canal destinado a contener el agua de lluvia y el excedente de los canales de riego. Desemboca en el Crouzelles y de ahí todo el contenido va hacia el arroyo Durán para finalizar en el río Limay.