El desfinanciamiento como política
No ve en la universidad pública una herramienta de progreso para la Nación, ni un motor de desarrollo, ni un espacio de formación de profesionales y ciudadanos.
En la Ley de Presupuesto se intentó, de manera encubierta, avanzar sobre la derogación de la Ley de Financiamiento Universitario.
Al mismo tiempo, el presupuesto proyectado para 2026 —tal como advierte el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN)— resulta claramente insuficiente para garantizar el funcionamiento adecuado del Sistema Universitario.
Como se observa en el cuadro que acompaña este análisis, los salarios docentes y no docentes perdieron poder adquisitivo durante todo 2025, sin siquiera contabilizar lo perdido en 2023 y 2024.
Lo que se percibe, como ciudadano y como parte del sistema universitario, es que la única intención del Gobierno Nacional es cerrar la canilla del financiamiento y dejar que el sistema muera por inanición. No existe una política real para la Educación Superior.
| 2025 | Aumento Salarial | Inflación | Diferencia |
| Enero | 1,50 | 2,2 | -0,70 |
| Febrero | 1,2 | 2,4 | -1,20 |
| Marzo | 1,3 | 3,7 | -2,40 |
| Abril | 1,3 | 2,8 | -1,50 |
| Mayo | 1,3 | 1,5 | -0,20 |
| Junio | 1,3 | 1,6 | -0,30 |
| Julio | 1,3 | 1,9 | -0,60 |
| Agosto | 1,3 | 1,9 | -0,60 |
| Septiembre | 1,2 | 2,1 | -0,90 |
| Octubre | 1,1 | 2,3 | -1,20 |
| Noviembre | 1,1 | 2,5 | -1,40 |
Al gobierno neoliberal, simplemente, no le interesa. No ve en la universidad pública una herramienta de progreso para la Nación, ni un motor de desarrollo, ni un espacio de formación de profesionales y ciudadanos capaces de transformar la realidad.
Las declaraciones del presidente refuerzan esta lógica:
- “Decían que iba a cerrar las universidades y eso nunca ocurrió.”
- No hace falta cerrarlas: alcanza con asfixiarlas presupuestariamente.
- “Las universidades van a seguir siendo públicas y no se van a arancelar.”
Pero tampoco se las va a financiar de manera adecuada. - “La universidad pública nacional hoy no le sirve a nadie más que a los hijos de la clase alta y los ricos.”
Una afirmación que no busca mejorar las condiciones de acceso de los sectores populares, sino desacreditar al sistema. - “Si no quieren ser auditadas, debe ser porque están sucias.”
Un discurso vacío y estigmatizante: las universidades nacionales son auditadas de manera regular. - “Aumentar el presupuesto universitario sería volver a las políticas de la vieja política.”
En otras palabras, se elige dejar que las universidades se apaguen solas.
La ausencia de una política de desarrollo también es una política.
Una política cruel, cínica y profundamente dolorosa, que afecta a miles de docentes y no docentes con salarios deteriorados, pérdida de motivación y condiciones laborales cada vez más precarias.
Afecta a estudiantes sin becas suficientes y a instituciones imposibilitadas de sostener actividades académicas de calidad.
La sociedad acompaña, pero la universidad no parece estar entre sus prioridades.
Incluso dentro del propio sistema, muchos docentes, no docentes y estudiantes aún creen en este modelo de gobierno. Mientras tanto, los gremios brillan por su ausencia: algunos negocian migajas, otros simplemente callan.
Y así, por omisión y desidia, se va construyendo el final.
* Especialista en Desarrollo Humano.
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