Pinochet reapareció en silencio y su familia dice que irá a declarar

Santiago (EFE-Télam-).- El ex dictador Augusto Pinochet asistió ayer a un homenaje que le brindaron sus partidarios para recordar a casi 500 policías y militares muertos durante la dictadura que encabezó entre 1973 y 1990, aunque se mantuvo en un estricto silencio.

En tanto, miembros de su familia confirmaron ayer que el ex dictador aceptará declarar ante el juez especial Juan Guzmán, que investiga 168 querellas en su contra por violaciones de los derechos humanos en su gobierno.

La organización del evento estuvo a cargo de la Fundación Augusto Pinochet al cumplirse 27 años desde que el ex dictador fue nombrado como comandante en jefe del Ejército por el entonces presidente Salvador Allende.

Sin hacer declaraciones públicas y protegido por un fuerte dispositivo de seguridad que lo mantuvo alejado de la prensa, Pinochet descubrió un monumento en memoria de las miembros de las Fuerzas Armadas y Carabineros que murieron en enfrentamientos con la guerrilla durante el régimen militar.

«Nuestro presidente, Augusto Pinochet Ugarte, agradece sinceramente a todos y cada uno de ustedes su valiosa presencia en esta ceremonia», declaró un representante de la Fundación.

Después del acto, Marco Antonio Pinochet, hijo menor del ex gobernante, aseguró que su padre no pondrá obstáculo alguno para dilatar las diligencias que adopte el magistrado, aunque manifestó su esperanza de que Guzmán «considere» que la salud de su padre está deteriorada. «Mi padre no se va a negar al interrogatorio. El lugar lo verá el juez, pero ojalá que considere su salud», sostuvo.

Marco Antonio reconoció que se analiza la posibilidad de solicitar exámenes médicos amplios al juez Guzmán y advirtió enfáticamente no aceptarán sólo exámenes mentales, como establece la ley chilena, según la cual sólo a los locos o dementes se les exime de ser juzgados.

Al homenaje acudieron parlamentarios derechistas, generales en retiro, ex ministros del gobierno militar y colaboradores.

Ausencias notorias

Pero hubo ausencias notorias como las de el comandante en jefe del Ejército, Ricardo Izurieta, y el general director de Carabineros, Manuel Ugarte, a pesar de que estaban invitados.

La presencia del ex gobernante militar fue la primera ocasión en que Pinochet participó en un acto público desde que el pasado mes de marzo regresó a su país. También fue la primera aparición pública desde que el pasado 8 de agosto la Corte Suprema le retiró la inmunidad parlamentaria.

Con semblante sonriente y acompañado de su esposa, Lucía Hiriart, el ex dictador llegó a la sede de la fundación en un «Mercedes Benz» escoltado por varios automóviles, dos ambulancias y policías en moto. Según comentaron los asistentes al acto, Pinochet -que se sostenía en pie ayudado de un bastón y apoyado en su esposa- dio muestras de gran entereza y serenidad. Las calles aledañas, que permanecieron cerradas al tránsito, fueron el escenario de la manifestación de apoyo de un centenar de simpatizantes, que recibieron con gritos y aplausos su llegada.

En el homenaje, que duró alrededor de una hora, el presidente de fundación, Hernan Briones, leyó un discurso en el que elogió el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 y los 17 años de gobierno militar. Sin embargo, el tono de los oradores fue moderado e incluso algunos admitieron «errores del pasado» y llamaron a la reconciliación.

Posteriormente, Pinochet cortó la cinta y descubrió un mural en recuerdo de los militares y civiles «caídos en actos terroristas durante su gobierno».

Pinochet permaneció media hora en la sede de la fundación para reunirse con el director de la institución, el general en retiro Luis Cortés Villa, y con el ex vicecomandante en jefe del Ejército, Guillermo Garín.

Lavín reafirmó su «despegue» del pinochetismo

El ex candidato presidencial de la oposición de derecha Joaquín Lavín lamentó que su sector siga anclado al «caso Pinochet» y opinó que mientras la gente en Chile ya se reconcilió, a los políticos aún les falta mucho para ello.

«Pienso que la gente común y corriente es mucho más sabia que sus propios líderes políticos. Tengo la percepción de que los chilenos hace mucho tiempo se reconciliaron y a nuestra clase política eso todavía le falta», dijo.

El ahora candidato a alcalde por el municipio de Santiago Centro y militante de la Unión Demócrata Independiente (UDI) dijo que no comparte las opiniones de algunos políticos de derecha que cuestionaron el fallo de la Corte Suprema que retiró el 8 de agosto la inmunidad parlamentaria a Pinochet, y destacó quese debe acatar el dictamen judicial. El político lamentó que los ánimos se hayan polarizado en este ámbito y subrayó que «en eso no voy a estar» . (EFE)

«No está en condiciones de ser actor político»

Santiago de Chile (EFE).- El general retirado Guillermo Garín, encargado de coordinar la defensa de Augusto Pinochet, dijo que el octogenario general retirado no tiene voluntad y «no está en condiciones» de convertirse en un «actor político contingente».

En declaraciones al diario «El Mercurio», Garín descartó que el ex dictador vaya a tener nuevas apariciones públicas como la de ayer.

«El no tiene ninguna voluntad -no está en condiciones tampoco- de convertirse en un actor político contingente. El ya pasó a la historia como el gran actor político… No es el propósito de él ahora (tener mayor figuración), ni mucho menos, ni está en condiciones de hacerlo», recalcó. El ex vicecomandante en jefe del Ejército señaló su confianza en que el proceso contra el senador vitalicio tenga «un desenlace favorable».

Por su parte, el abogado Gustavo Collao, insistió en la tesis respecto al «debido proceso», de acuerdo a la cual el ex gobernante debe ser eximido por no encontrarse en condiciones de defenderse.

«El estado de salud del general Pinochet constituye una causa por la cual él no puede realizar una defensa justa y razonable», afirmó.