La Justicia da por probado el «plan criminal» y sostiene que Brenda Uliarte compró el arma en abril

La magistrada procesó y les dictó prisión preventiva Uliarte y Sabag Montiel por el atentado a Cristina Kirchner. Además, mandó a trabarles embargos sobre sus bienes.

La jueza federal María Eugenia Capuchetti procesó hoy con prisión preventiva a Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte por haber intentado asesinar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, informaron fuentes judiciales.

La jueza los sindicó como «coautores» del delito «tentativa de homicidio calificado», por el ataque concretado el 1° de septiembre pasado, cuando la exmandataria saludaba a los manifestantes que fueron a expresarle su apoyo a la puerta de su casa en el cruce de las calles Juncal y Uruguay de la Ciudad de Buenos Aires.

La Justicia dijo que el intento de asesinato fue el «capítulo final» de un «plan delictivo» que planearon juntos los detenido y que la joven fue la compradora de la pistola Bersa usada en el hecho.

«Los sucesos del 1 de septiembre fueron el capítulo final del plan delictivo que previamente habían acordado, diseñado y estudiado» los dos detenidos, concluyó la jueza Capuchetti, en la resolución en la cual procesó hoy con prisión preventiva a ambos como coautores de tentativa de homicidio calificado, según el texto al que tuvo acceso Télam.

Una de las imágenes de Brenda Uliarte con el arma.

En un apartado del procesamiento titulado «El plan criminal elaborado» por Sabag Montiel y Uliarte, la magistrada dio por reconstruido todo lo ocurrido gracias al análisis que realizó la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) de la información contenida en los teléfonos celulares secuestrados a ambos acusados.

Según esta reconstrucción, todo comenzó el 22 de abril último, cuando Brenda Uliarte habría adquirido la pistola semiautomática, «de acción simple, calibre .32 auto, marca Bersa, modelo Lusber 84″a, modelo Lusber 84, con la numeración ‘25037’ en el lateral izquierdo del cañón, luego utilizada para cometer el hecho investigado».

El día señalado, Uliarte le indicó a un contacto identificado como «Serena» que había adquirido un arma de fuego.

«Si tengo un fierro lo compre porque mi ex está jede», escribió a ese contacto, según el mensaje recuperado de su teléfono celular por la PSA. Ese mismo día le dijo a otro contacto agendado, «Fran: tranqui no va a pasar nada… es mío el fierro»

El 4 de julio se comunicó con el contacto «Amor de mi vida», quien resultó ser Agustina Díaz, la tercera detenida en la causa y cuya situación procesal está pendiente de resolución aún.

«Voy con el fierro y le pego un tiro a Cristina… me dan los ovarios para hacerlo … el tema es cómo, porque la vieja tiene seguridad», le escribió.

«Dicha circunstancia pone de relieve que, para esa época, Uliarte ya había tomado la decisión de atentar contra la vida de la Sra. Vicepresidenta, Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, iniciando así el curso del plan al cual solo le bastaba definir las circunstancias de modo, tiempo y lugar de su ejecución», determinó la jueza.

La segunda parte del plan «ocurrió posteriormente a partir de la inteligencia que tanto ella como Sabag Montiel realizaron en días previos al atentado»

En el procesamiento se incluyeron numerosas fotografías de Uliarte manipulando la misma pistola que fue secuestrada en el lugar de los hechos el 1 de septiembre, luego de ser gatillada por Sabag Montiel .

Antes del atentado, el 23 de agosto, ambos detenidos » mantuvieron una conversación, en el marco de la cual Sabag Montiel le refirió: «Otra cosa, me contestó el tipo del alquiler de Recoleta para el sábado tenemos que verlo y dice que no tiene… Eh… No sé, tiene que coordinar varias entrevistas y que le dejen una seña viste que se yo, asi que le dije que íbamos a tener plata para dejarle una seña».

«En dicha oportunidad, Uliarte le contesta: «¿No te gusta el depto.?», a lo que Sabag Montiel responde «no me gusta el depto, el pelo si. Cristina y la gente está reunida en Recoleta. Para pegarle un corchazo».

Uliarte respondió mediante el envío de un audio: «No amor, laburamos esta semana y el sábado vamos y le dejamos una seña, ya fue…Alto depto ese de Recoleta amore, si vieras donde vive Cristina entendes, Cristina vive en Recoleta, estamos re cerca de la mina. La podemos hacer pija, eh…Si, hay que ir y pegarle un corchazo ¿Sabes que hace falta? Un francotirador, viste que la mina se pone en el balcón, hace falta ahí y pimba, un tiro en la cabeza, hacerla mierda…».

Para la jueza, Sabag Montiel y Uliarte planearon el hecho por igual en lo relativo a «modo, tiempo y lugar de su ejecución» que estaba «previamente establecida por ellos».

«Si bien fue Sabag Montiel quien utilizó el arma de fuego contra la víctima, lo cierto es que Uliarte también tuvo activa participación en la ejecución del hecho, en el cual estaba presente a escasos metros de lo ocurrido, brindando el apoyo logístico y moral para su realización», concluyó

La jueza les trabó embargo

La magistrada, además, mandó a trabarles embargos sobre sus bienes por 100 millones de pesos a cada uno, según surge de la resolución judicial a la que accedió la prensa.

Agencia Télam.


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