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Alberto Fernández vuelve a Vaca Muerta en un intento por recuperar la agenda positiva
Se espera que anuncie la licitación del gasoducto Néstor Kirchner -solo se concursaron los caños-, que ya despertó una fuerte puja empresarial en el país.
Gutiérrez y Fernández, en la última visita presidencial a la región.
En medio de la interna oficialista y la acumulación de malos resultados, el presidente Alberto Fernández volverá a Vaca Muerta para interna reconstruir una agenda positiva, con el respaldo de uno de los sectores que mayor recuperación económica tuvo y que aún guarda buena sintonía con el gobierno nacional.
El escenario no será del todo sencillo porque el sector energético de su gabinete, puesto allí por la vicepresidenta Cristina Fernández, es el más resiste la política de recortes de subsidios que reclama el FMI.
La última vez que estuvo, el 15 de octubre de 2020, la pandemia de Covid-19 apenas permitía las actividades públicas y fue por esa recomendación de distanciamiento social, que se justificó la falta de apoyo popular.
Ahora habrá qué ver qué clima le prepara el secretario de Energía, Darío Martínez, quien busca mantener su ambivalencia en la interna oficial, pero que ayer se perdió la pulseada en el anuncio de la visita oficial.
Sin embargo, la novedad que trae Fernández tiene una relevancia alta para Vaca Muerta.
Según pudo reconstruir RÍO NEGRO el mandatario informará la fecha de la licitación de la primera etapa del gasoducto Néstor Kirchner, que unirá Neuquén con Salliqueló (Buenos Aires): 1.566 millones de dólares.
Por el momento solo se compulsaron los caños y el único oferente fue el grupo Techint del empresario ítalo argentino Paolo Rocca. La megaobra, que tiene una segunda etapa proyectada para llegar al sur de Santa Fe, ya aceleró una fuerte puja empresarial entre los pesos pesados de la construcción petrolera.
Rocca además de la provisión de caños busca también levantar el obrador. En la vereda de enfrente, un hombre cercano al gobierno, como es Marcelo Mindlin, ya se anotó públicamente en la contienda.
Además de las buenas noticias, el presidente buscará algo de apoyo territorial con una recepción de gobernadores, por ahora, acotada. El anfitrión será el neuquino Omar Gutiérrez, quien ayer oficializó la visita presencial antes de partir desde Houston hacía el país.
El pampeano Sergio Ziliotto fue el primero en confirmar y seguramente se sumará la rionegrina Arabela Carreras. El resto todavía está en reserva.
La visita se realizará el jueves 21 de la semana próxima, en principio se había anunciado que sería el miércoles pero luego fue rectificado por “razones de agenda”.
El escenario será Loma Campana otra vez, la cuna de Vaca Muerta que nació con la expropiación del 51% de las acciones de Repsol YPF y que la vicepresidenta se adjudicó durante el último acto por Malvinas.
En Neuquén las palabras de Cristina fueron una cachetada al ego del MPN y trató de ser suavizada en una frase: “los triunfos tienen muchos padres y madres, pero las derrotas uno solo”.
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