¿Qué pasará con el fútbol en Argentina?

Conmebol puso al 17 de septiembre como fecha para el regreso de la Libertadores. Esa decisión adelantó los tiempos en el fútbol argentino.

El manejo de la pandemia por parte del gobierno nacional tuvo como estrategia una cuarentena más larga y estricta que en el resto de la región u otros países del mundo. Eso se tradujo en menos muertes y contagios de las que se dan en distintos puntos de Sudamérica.

En el fútbol, la diferencia en el tipo de confinamiento que eligió cada Estado queda todavía más clara, ya que en varios ya se permiten los entrenamientos y algunos incluso están en competencia como Brasil o Paraguay, que arrancó esta semana.

El escenario puso a los dirigentes argentinos en un aprieto. Con Claudio Tapia a la cabeza, desde un principio se supeditaron a lo que decidiera el gobierno, pero con la Libertadores cerca del regreso y la necesidad de que Boca, River, Racing, Defensa y Tigre vuelvan a entrenar, el panorama cambió. Es por ello que se aceleran los tiempos y, mientras el país sale muy de a poco del aislamiento social, las prácticas presenciales asoman en el horizonte.

Al mismo tiempo, las declaraciones de Pedro Cahn, uno de los médicos especialistas más cercanos al gobierno de Alberto Fernández, hacen ruido y ponen un manto de duda.

Si bien se mostró de acuerdo con los protocolos para los entrenamientos, su concepto fue claro: ‘‘Yo no mandaría un plantel a jugar a Brasil’’, afirmó.
Dentro de los partidos que quedan en fase de grupos, River, Tigre y Defensa tienen pendientes visitas al mencionado país, el más afectado por el coronavirus en el hemisferio sur.

Teniendo en cuenta la dinámica de la pandemia y los posibles rebrotes que ya se han dado en Europa y otras partes del mundo que intentaron salir del confinamiento, nadie puede asegurar que la Libertadores se pueda jugar como está previsto. Si bien la Confederación estableció la vuelta para mediados de septiembre, no es posible emitir sentencias a mediano plazo. Todo se remite al día a día y la cantidad de casos y fallecidos que tenga cada país.

Tapia y Alejandro Domínguez, de Conmebol, son actores claves en estos tiempos.

Con este marco de situación, el regreso para el fútbol en el ámbito doméstico parece todavía más lejano. No son pocos los que puertas adentro creen y avisan que las ligas provinciales volverán recién en 2021. El razonamiento se cae de maduro: si a los grandes clubes del país les está costando volver por la situación sanitaria, ¿qué les queda a los clubes de barrio o de pueblo?

En este contexto, Argentina marcó ayer otro récord de contagios diarios de covid-19. El presidente de la nación advirtió en la conferencia de prensa de la semana pasada que si los números no respaldaban la flexibilización del distanciamiento social que anunció, no tendría problemas en volver sobre sus pasos y repetir restricciones.

Van cuatro meses entre cuarentena, aislamiento y destancia social, y el fútbol como actividad e industria lo está sufriendo. La situación sanitaria no mejora y el futuro está lleno de incertidumbre, también en el deporte.


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