Recelo de exempleados de la Embotelladora Comahue tras la tasación de $ 269 millones

La planta de la ex Embotelladora Comahue S.A. ya tiene un valor concreto y se encamina hacia una licitación para liquidar el capital.

La planta de la ex Embotelladora Comahue S.A., ubicada a la vera de la Ruta 22, ya tiene un valor concreto y se encamina hacia una licitación para liquidar el capital.

De este proceso se busca resolver la deuda que Interlagos contrajo con los 84 ex trabajadores, entre otros acreedores que esperan hace más de un año para cobrar indemnizaciones y varios montos adeudados.

$269.422.200 es el valor total, y de eso, casi 98 millones suman lo que este sector privilegiado por la Ley de Quiebras deberá percibir.

Un lote de vehículos y maquinaria se venderá por separado. Desde el gremio, y entre los ex trabajadores, descreen de la suma que resultó de las tasaciones, y se mostraron escépticos de cara al futuro y ante el cobro.

El valor total de la planta y lo que incluye en sus haberes es de $269.422.200. Esto se desglosa en un detallado inventario que confeccionó el síndico designado, asistido por un enajenador y tasador externo. De la abultada suma, cerca de $97.947.348 es lo que corresponde a todas las indemnizaciones, incentivos y aguinaldos adeudados que deberían cobrar los ex empleados.

Por tratarse de una fabrica que no hace mucho estuvo en producción, la maquinaria e insumos está vigente, y eso motivó a la venta por unidad. Para que el proceso tenga mayor transparencia, el juez que maneja este caso, Diego De Vergilio decidió que se llevará adelante mediante una licitación pública.

Alejo Helgueta, titular del sindicato que rige al rubro, Sutiaga, y ex empleado, se ríe cuando escucha la cifra. “¿Quién va a venir a meter plata a una empresa quebrada?” se pregunta, y se responde: “La mayoría lo pondría en un plazo fijo, como están las cosas hoy es improbable que se consiga toda esa plata junta”, se lamentó. No obstante, él mismo está incluido en la nómina de los 84.

En ese sentido, el sindicalista aseguró que la empresa no realizó los aportes sindicales durante “cerca de cinco años”, por lo que también son parte acreedora, pero “no privilegiada”, acotó. Poco más de tres millones y medio de pesos es lo que deberá cobrar el gremio, al final de la fila que integran las diferentes entidades fiscales y proveedores.

“No creo nada”, dijo de forma categórica Pablo Leguizamón, ex empleado y uno de los impulsores de la frustrada conformación de una cooperativa.

Muchos exempleados tienen más de 50 años y pasaron toda su vida laboral en el interior de esta fábrica. “Se les dificulta mucho ingresar al sistema laboral, están capacitados para tareas específicas de la planta”, agregó.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios