Qué le pasó a Bryan Randall, el novio de Sandra Bullock que murió
La actriz Sandra Bullock se encuentra enfrentando uno de los momentos más difíciles, además de acompañar a los hijos de la pareja. Bryan Randall atravesaba una enfermedad desde hace tres años.
Sandra Bullock acompañó a su marido, Bryan Randall, hasta el último momento.-
Sandra Bullock atraviesa uno de los momentos más complejos de su vida, ya que su pareja Bryan Randall, reconocido fotógrafo de Hollywood, murió ayer a los 57 años, después de dar batalla a una larga enfermedad que lo afectó severamente en los últimos tres años.
Según indicó la revista «People», Bryan Randall y Sandra Bullock compartieron ocho años juntos y la crianza de los hijos que ambos tuvieron con otras parejas.
«Para los niños, él es el número uno y yo la número dos. Mi familia es diversa, loca, cariñosa y comprensiva» había contado sobre su familia Sandra Bullock por el vínculo de los niños con su marido, quien se convirtió en un gran pilar.
La relación entre Bryan Randall llegó en un momento clave para Sandra Bullock, quien salía entonces de un duro divorcio con Jesse G. James, su expareja que reconoció ser adicto al sexo y por lo que había sido infiel a la actriz en varias ocasiones.
Sin embargo, ayer se confirmó la triste noticia del fallecimiento de Bryan Randall, quien tuvo que enfrentar un diagnóstico de Esclerosis Lateral Amiotrófica o ELA, una condición que afecta la actividad neuronal, el tronco cerebral y la médula espinal que controlan el movimiento de los músculos voluntarios y suele ir desmejorando la salud de quien la atraviesa.
El anuncio de la muerte de Bryan Randall, el novio de Sandra Bullock
Según informaron medios internacionales, la familia de Bryan Randall fue quien comunicó la muerte del novio de Sandra Bullock, en un breve comunicado.
«Es con gran tristeza que compartimos que el 5 de agosto, Bryan Randall falleció en paz después de una batalla de tres años contra el ELA«, anunciaron.
Durante el proceso de la enfermedad, Sandra Bullock, la pareja del fotógrafo, mantuvo en privacidad la enfermedad de su esposo, respetando su decisión de no hacerlo público y de contener especialmente a sus hijos.
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