Rosana ya está en Bariloche

Esta noche la cantante española brindará su show en La Baita y presentará su disco 8 Lunas.

ESPECTÁCULOS

La artista española Rosana llegó a Bariloche y esta noche (31/07) se presentará junto a su banda en el teatro La Baita. “Estoy completando la gira prevista para Argentina y que debí interrumpir por tener que operarme la rodilla”, explicó. Aseguró que vino manejando, desde Comodoro Rivadavia, y que está totalmente recuperada de su intervención quirúrgica de meniscos.

Visiblemente feliz por estar en la Patagonia la artista se abrazó efusivamente con Paula Fenoglio, titular del teatro donde actuará, con quien estableció amistad por sus presentaciones anteriores.

Hoy presentará su último disco, 8 Lunas, que constituye el repertorio central de su gira por Argentina. El disco se presentó en noviembre de 2013 y reúne 16 temas que en alguna medida resumen 17 años de éxitos. En éste álbum, Rosana invitó a algunos de sus colegas de la escena musical, dando como resultado un álbum “de viejas canciones pero que parecen nuevas” donde Rosana reinventa temas tan conocidos como “El Talismán”, acompañada del maestro Rubén Blades, o “Si tu no estás” con el cantante de la agrupación Camila, Mario Domm.

Respecto a su show, comentó que la primera parte es la presentación de “8 Lunas”, que es muy eléctrica, y luego, en la segunda mitad del show la artista y la banda se sientan con la guitarra acústica y dejan que sea la gente la que decida qué es lo que quieren escuchar.

“Cada noche la gente quiere escuchar cosas distintas. A veces no me acuerdo el texto, a veces los chicos no se saben la canción – pero mayoritariamente sí – de repente ocurre que a veces te piden alguna canción más extraña y te acuerdas a lo mejor porque es la canción que siempre piden, pero siempre hay dos canciones que canto sí o sí porque se genera una especie de juego con la gente, pero del resto dejamos que sean ellos los que hacen su repertorio “a la carta”, expresó Rosana, en el hotel Panamericano.

Nació en las Islas Canarias y desde pequeña tiene pasión por la música. “La primer guitarra me la regaló papa a los 5 años”, recordó. Al cumplir 20 años viajó a Madrid donde estudió música y en 1994, una canción de su autoría “Fuego y Miel” cantada por Esmeralda Grao ganó el primer puesto en el premio del Festival Benidormo. A partir de allí, su carrera es una sucesión de éxitos.

“Creo en la música como pócima, a veces como interacción y la gran parte de las veces, no sé, como un revulsivo para que tomemos conciencia y deseemos cambiar las cosas. Yo tengo una frase que digo siempre porque así siento, no? En mi caso es así, no sé si ocurrirá a todo el mundo. Digo que mis canciones no se terminan hasta que no las comparto. Yo la hago, la escribo, la grabo, la saco al mercado, pero hasta que no se comparte, la gente no se adueña de ella y le va dando otras formas, no está terminada. Por eso, en verdad, nunca concluye porque constantemente hay personas redescubriendo lo que otras detectaron antes. Pasa un montón de veces que muchísimos años después de que su autor muriera, un tema reaparece y se coloca en el mundo como si fuera de ayer… Existe una especie de motor que hace que la gente siga descubriendo continuamente una canción. Continuamente. Cada vez que la escucha la descubre, por eso las canciones son como el aire. Ni se envasan, ni se concluyen”, explicó, en diálogo con “Río Negro”.

DeBariloche


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