“Santiago Torres: capataz del gobernador Carlos Bouquet Roldán”

La foto del lector

El entramado social neuquino, en los albores del siglo XX, estuvo constituido por distintos personajes que merecen ser recordados por medio de la voz de sus descendientes. El caso que hoy nos ocupa pertenece a don Santiago Torres, quien trabajó como capataz del gobernador Carlos Bouquet Roldán.

Este gobernador era oriundo de Córdoba. Realizó una vasta carrera política y en 1903 se le designó, por decreto del Poder Ejecutivo nacional, la gobernación del Neuquén. Le cupo el honor de inaugurar la nueva capital del territorio neuquino, el 12 de septiembre de 1904, trasladándola desde Chos Malal a la confluencia de los ríos Neuquén y Limay. Trazó y delineó la nueva capital durmiendo en carpas sacudidas por los fuertes vendavales que azotaban el villorrio.

Aún le faltaban unos meses para terminar su mandato y el superior gobierno de Buenos Aires lo designó administrador de la Aduana de la capital. Cumplió un período esta nueva tarea, hasta que renunció al cargo en 1910 y regresó a Neuquén para instalarse en su casa de campo La Sirena, ubicada en la actual Colonia que, en su homenaje, lleva su nombre –como recordara en sus escritos Agustín Ríos–. En 1911 ocupó la Dirección de la Sociedad Anónima Nueva España, encargada de la venta de estas tierras neuquinas, en representación de su principal amigo y accionista, don Casimiro Gómez. Bouquet Roldán fue dueño de hectáreas linderas con el río Limay. Casimiro, recordamos, era un español que a fines del siglo XIX vino a la Argentina y se dedicó al ramo de los cueros y las suelas, formó una gran curtiembre y se especializó en talabartería fina. Tuvo campos en la provincia de Buenos Aires, en Santiago del Estero y en nuestra zona.

Santiago Torres nació en San Luis. Cuando era joven viajó a Córdoba por razones de salud, donde conoció a don Casimiro Gómez y trabó cierta amistad. Como Gómez a su vez era amigo y conocido de Carlos Bouquet Roldán, había comprado tierras en este territorio neuquino. Le solicitó a don Torres que viniera a Neuquén, y éste arribó en 1912 y trabajó como capataz del gobernador, en La Sirena. Acá se casó con Esther Labrin y de esa unión nacieron Hortensia
–casada con Héctor Hugo–, Esther, Santiago, Aurora
–nuestra entrevistada, que hoy tiene jóvenes 90 años– y Roberto César.

Cuando Bouquet Roldán se fue a Buenos Aires, don Torres le cuidó sus pertenencias y su casa de La Sirena. Como parte de pago le dio tierras en lo que hoy es barrio Jardines del Rey. Don Santiago compró los terrenos en calle Independencia al 500, donde hoy viven su hija y descendientes.

Hoy nos queda el recuerdo y la imagen de la casa y el predio donde habitó el gobernador, deteriorados, ubicados en calle Lanín al 1750, entre Gobernador Anaya y Purciano Labrín –padre del maestro Naldo Labrin–. Allí están las edificaciones que formaban el casco de la estancia La Sirena, tierras que fueron expropiadas por el Ejército y posteriormente por el gobierno provincial.

Autoridades de la Provincia y del Municipio, ésta es otra parte de nuestra historia que merece ser rescatada del olvido. Restauremos y declarémosla patrimonio histórico. Sus estropeadas instalaciones, el predio, encierran mucha historia neuquina imposible de olvidar.

Beatriz Carolina Chávez

DNI 6.251.256

Beatriz Carolina Chávez

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