Carlos, el cuidador de Máxima y la nueva hipótesis que sostiene su familia en Chile: «Acá hubo terceros»

Su nieto dialogó con medios del país vecino a casi un mes sin novedades del hombre de Villa La Angostura. El operativo se lleva a cabo con temperaturas de hasta -8°C.

Permanece la incertidumbre sobre el paradero de Carlos Ancapichun, el cuidador de la casa de la Reina Máxima, a casi un mes de su desaparición en Chile. La investigación aún no arroja resultados y desde su familia creen que un tercero estuvo involucrado. Las dudas que tienen sobre lo que ocurrió.

Carlos vive en Villa La Angostura y viajó al parque nacional Puyehue el pasado viernes 13 de junio para visitar a familiares y recorrer un terreno donde planificaba construir una vivienda.

Tras el fin de semana, el lunes 16 de junio, personal de carabineros halló su camioneta a un costado del camino a Antillanca.

Desde entonces, se encuentra activo un rastrillaje de la mano de la Asociación de Búsqueda y Rescate en Zonas Agrestes (BRZA) para dar con su paradero. Además intervienen referentes del Ejército y otras organizaciones de rescate, sumando un total de 60 personas abocadas a ello.

Mas allá de datos llamativos que hacen dudar a las autoridades respecto de un posible accidente o la intervención de terceros, el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) decidió retirarse del operativo de búsqueda.


Incertidumbre por el paradero de Carlos Ancapichun en Chile: qué dijo la familia


Miguel Ojeda, nieto de Carlos Ancapichún, dialogó en el programa Contigo en la Mañana sobre el caso de su abuelo, quien trabaja en la estancia de Cumelén, con vista al lago Nahuel Huapi, donde se encargaba de cuidar la vivienda donde la familia de la Reina Máxima pasa sus vacaciones de verano en Argentina.

«Estamos bastante angustiados por el caso de mi abuelo, ya se va a cumplir un mes desaparecido acá en la zona», sostuvo.

Con respecto al operativo, explicó que es bastante «complicado» por la extensa vegetación y la gran cantidad de árboles, en una zona poco habituada por las personas que viven en los alrededores.

Ojeda volvió a explicar que la última vez que habló con él fue el pasado jueves 12 por teléfono, en donde habían quedado en cruzarse en la localidad Entre Lagos.

En este sentido, indicó que su abuelo nunca viajaba con celular encima, ya que no le gustaban, y que encima en la zona donde localizaron su vehículo ni siquiera hay señal. Además, sumó que el camino no es tan accesible.

Cuando carabineros alertó sobre su desaparición, Ojeda viajó hasta Puyehue y a través de los vidrios de la camioneta pudo ver todas las pertenencias de Ancapichun, como su ropa de abrigo y sus documentos en el asiento del acompañante.

«A esta altura se manejan varias hipótesis que están en tema de investigación por el lado de la Policía de Investigación (PDI)», respondió con respecto a las sospechas que tiene la familia y resaltó: «El fiscal tiene que ordenar, pero creo que igual fue por terceros, involucrado terceros, porque hemos recorrido el bosque y no se encuentra nada de su ropa».

Asimismo, añadió que su abuelo nunca comentó nada sobre algún conflicto con alguien en particular: «Es bien extraño todo, así que muy complicado».

A la vez, el nieto del hombre de Villa La Angostura resaltó que su abuelo se crió en la zona donde se extravió y que «lo más extraño» es que haya dejado toda su indumentaria de invierno dentro del vehículo antes de meterse al bosque.

A esto, le sumó que todo habría sido después de las 4.30 y que, dado a que iba a trabajar en el terreno, es un horario muy próximo a oscurecer. «Estamos muy angustiados», concluyó.


Intriga en Chile la falta de peritaje en la camioneta: su pareja se la llevó a Villa La Angostura


Desde Chilevision indicaron que la camioneta fue encontrada a 2,5 kilómetros de la casa de su hermano y que, como no tenían copia de la llave, la pareja de Ancapichun viajó desde Villa La Angostura y retornó a la Argentina con el vehículo sin que ninguna autoridad haga ningún tipo de peritaje.

Mientras tanto, las tareas de rastrillaje se siguen llevando a cabo en la zona agreste con temperaturas que llegaron a los -8°C, ya que es una zona muy próxima a un centro de ski.