Cosecharon los primeros 40 kilos de cannabis medicinal en la estación del INTA, en Guerrico
Los primeros productos surgidos de esta producción se terminarán de elaborar en los laboratorios de Profarse, en Viedma. Un logro que seguramente tendrá amplia difusión en todo el país.
Es época de cosecha. Y los técnicos y profesionales del INTA de Guerrico saben que la tarea ha sido extensa pero los resultados están a la vista y por eso se muestran satisfechos del tiempo y la energía invertida en la plantación del cannabis medicinal que podrá mejorar la calidad de vida de miles de pacientes.
Y la buena noticia es que después de cuatro años se inició la primera cosecha de cannabis en la estación experimental del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), en Guerrico. Ya arrancó el proceso de secado con más de 40 kilos y hay otra cosecha de una menor cantidad que también está en esa etapa.
Mariana Amorosi -responsable legal del cultivo de cannabis por INTA Patagonia Norte- resaltó este importante logro tras el acuerdo firmado en el año 2019 con la Asociación Civil Ciencia Sativa para avanzar en la investigación y el desarrollo de toda la cadena productiva de cannabis con fines terapéuticos y medicinales en la región.
“Ya se cosecharon 40 kilos y hay otro grupo de plantas que se encuentran en pleno procesamiento de secado. Luego se retiran las flores revisando cada una para que no tengan hongos o cualquier otra plaga”, dijo Amorosi quien destacó que la otra variedad cosechada ya se encuentra a resguardo.
Este proyecto integra un programa de fitomejoramiento, banco de germoplasma y propagación de variedades en el INTA Bariloche , el cultivo en la Estación Experimental Alto Valle del INTA y, dentro del mismo predio, la extracción de resina en el laboratorio Pasedati.
La elaboración de los fitopreparados estará a cargo del laboratorio Productora Farmacéutica Rionegrina Sociedad del Estado – Agencia Nacional de Laboratorios Públicos (Profarse- Anlap), ubicado en Viedma.
“La idea era generar toda la cadena desde la semilla hasta el producto final que va a consumir la sociedad”, dijo Amorosi quien destacó que en esta prueba piloto ya está en pleno proceso la cosecha.
Cannabis medicinal en el INTA: el proceso
Amorosi recordó que en diciembre se trasladaron los “esquejes” (brotes) desde el laboratorio de Bariloche hasta el microtúnel en el predio del INTA en Guerrico y que totalizaron unas 850 plantas.
“Ahora viene el proceso de cosecha y secado, y la extracción de resina”, remarcó la representante del INTA quien destacó que se realizará en Viedma hasta tanto se concluya con las obras para la finalización del laboratorio que se levante en el predio de Guerrico.
Además se prevé generar distintas modalidades de cultivo bajo cubierta en invernáculo, en macrotúnel y a cielo abierto para conocer cómo la planta se comparta bajo diferentes condiciones de producción.
Ahora, en la estación experimental de Guerrico cuenta con un invernadero, un macrotúnel y ahora se construyen otros 86 metros de invernadero.
“En breve se estará terminando el proceso de construcción del laboratorio Pasedati -que estará en el predio de INTA- de manera que podremos extraer la resina acá y luego el procesamiento final se realizará en Viedma”, explicó la representante del proyecto en el INTA, quien destacó que hay unas 10 personas que actualmente desarrollan tareas en este innovador proyecto.
Pero la propuesta también avanzará a nivel regional ya que están en contacto con el Ministerio de Salud de Neuquén para que el laboratorio de preparados magistrales pueda cumplir el mismo rol que Profase que está en la capital rionegrina.
Cannabis medicinal en el INTA: Viedma, el último eslabón
La cadena comienza con INTA y Ciencia Sativa que genera la producción primaria que es el “cogollo” .
Luego en el laboratorio Pasedati se extrae la resina y finalmente se traslada al laboratorio Profarse que elaborará el producto final para que los usuarios puedan tener un producto seguro.
“Este es el primer proyecto y el primer laboratorio que se está construyendo y que cuenta con la aprobación de Anmat. Actualmente todos los extractos vienen de otros países donde hay cultivo a gran escala, a excepción de Jujuy. Son cultivos muy incipientes en todo el país. Por eso es tan importante el desarrollo de este proyecto en nuestra región”, destacó. Amorosi explicó que los primeros productos para consumir se podrán conseguir antes de que finalice el 2023.
Amorosi, también destacó la participación de la agencia Innova, de la provincia de Río Negro a cargo de Ricardo Quintana, y expresó que en todo este proceso los respaldaron en la búsqueda de financiamiento.
Cannabis medicinal en el INTA: blindados y con custodia Federal
La seguridad del predio donde se encuentran las plantas de cannabis medicinal fue un tema de preocupación para las autoridades del INTA quienes por todos los medios avanzaron en un proyecto para tratar de evitar cualquier hecho delictivo que pudiera terminar con el ingreso de personas desconocidas al predio ubicado a la vera de la Ruta Nacional 22, en Guerrico.
Amorossi explicó que puntualmente este año lograron reforzar las medidas y ya trabaja personal de la Policía Federal en ese sector que se encuentra totalmente cercado y resulta de difícil acceso para cualquier persona.
Cannabis medicinal en el INTA: cerco y cámaras
El predio actualmente cuenta con un doble cerco perimetral. Y además tiene un sistemas de cámaras de seguridad por lo que los guardias tienen la posibilidad de realizar el monitoreo del sector emplazado en la zona rural.
Pero además, para acceder al sector donde están las plantas, hay un sistema de barreras y cuenta con una alarma perimetral que pone en alerta a todo el personal en caso de que una persona ingrese a ese sector sin la autorización correspondiente.
Para Amorossi la seguridad no resultaba un tema menor teniendo en cuenta que es un sector donde se trabaja con medidas extremas y protocolos y por eso les preocupaba que se produjera cualquier hecho delictivo que implique un robo o un acceso a las instalaciones que tiene el INTA.
“Es por eso que desde mediados de marzo ya contamos con la seguridad que nos brinda la Policía Federal y desde ese momento tenemos personal durante las 24 horas”, explicó la referentes del proyecto en la región.
Si bien los cultivos y los invernaderos se pueden observar desde la Ruta Nacional 22, el ingreso de cualquier persona es extremadamente complicado y si no se cuenta con la autorización correspondiente se corre el riesgo de terminar detenido y con el inicio de una causa federal.
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