El visón americano, la plaga de la Patagonia: cómo es el plan para controlar la población

El peculiar mamífero es capaz de comerse a animales más grandes que él, pese a pesar menos de un kilo.

Desde Neuquén a Tierra del Fuego, la imagen del visón americano se repite en toda la Patagonia y desde Parques Nacionales buscan controlar lo que ya consideran como una «plaga». El organismo nacional «hace lo imposible»– afirmó uno de sus trabajadores- para eliminar completamente al peculiar mamífero carnívoro de cuerpo alargado.

El visón americano es una especie que tiende a expandirse por su gran capacidad de adaptación, ya sea en montañas, bosques, mesetas y costas. Por eso, aseguran que es imposible cuantificar la población en la Patagonia.

El biólogo Hernán Pastore, referente de Fauna de la División Patagonia Norte de Parques Nacionales, alertó a Diario RÍO NEGRO que: «En Santa Cruz, por ejemplo, han llegado arriba de las mesetas donde antes no se los encontraba. Han colonizado la estepa”.

Los métodos para atrapar al visón americano, el animal que se convirtió en plaga en la Patagonia


En este contexto, las autoridades buscan eliminarlo completamente a través de trampas. Pastore comentó que «se hacen campañas de control continuas especialmente en áreas prioritarias, como por ejemplo los sitios de reproducción del pato de los Torrentes o del macá tobiano”. En isla Victoria, además, suelen colocarse trampas constantemente.

Hay dos métodos pasa atrapar al visón. Uno de ellos es el uso de trampas de captura muerta, en donde el animal muere inmediatamente y el cual se emplea en los ríos donde nidifica la especie.

El visón americano conquistó la meseta de Santa Cruz.

Otro de los métodos es las trampas de captura viva, que atrapan al ejemplar sin matarlo. En la zona se usa para evitar la muerte de huillines, zorros y otros mamíferos menores.

A su vez, Pastore explicó que con las especies exóticas “no hay más opción que eliminar a los individuos”. También enfatizó en que los visones no tienen depredadores naturales. Sin embargo, advirtió que: «Uno puede suponer que si un puma se cruza con el visón puede matarlo. Solo por competencia»


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