Los beneficios de incorporar los hongos en la alimentación

La Licenciada en Nutrición Eva Henderson (MN 8805) experta en alimentación vegetariana y vegana, miembro de la Sociedad Argentina de Nutrición y de la Unión Vegana Argentina, explica sobre la importancia de incorporar los hongos en la dieta.

Ni plantas ni animales, los hongos son un grupo de seres vivos que tienen su propio reino llamado Fungi. La ciencia que los estudia se llama Micología. Muchas veces, la palabra hongo hace referencia a algo en descomposición, sin embargo, hay una variedad de hongos comestibles que aportan muchos beneficios a la salud.

Beneficios en la salud

Desde tiempos antiguos, desde que se camina la tierra, se ha ido experimentando con las riquezas alimentarias que la naturaleza provee. El consumo de hongos es reconocido y valorado, desde las antiguas civilizaciones, por sus beneficios en el cuerpo.

Además, se han utilizado tradicionalmente como medicina. Es una fuente alimentaria con gran aporte de vitamina B y D, potasio, fósforo, hierro y calcio. Tienen alto contenido de proteínas, por lo que resultan el complemento ideal para dietas vegetarianas.

Cada vez hay más investigaciones que dan cuenta de las propiedades antivirales, antibacteriales y anticancerígena que poseen los hongos»
Eva Henderson, licenciada en nutrición

“En cuanto a los beneficios en la salud, los hongos tienen muchísimos, hoy están muy estudiados. Cada vez hay más investigaciones que dan cuenta de las propiedades antivirales, antibacteriales y anticancerígena que poseen los hongos. También se ha registrado que tienen acción antitumoral, lo cual es una muy buena noticia”, explica la licenciada en nutrición Eva Henderson.

“Los hongos han registrado ser muy buenos gracias a unos compuestos que contienen, que se llaman betaglucanos, que son buenos para la regulación de la presión arterial y del azúcar en sangre. Por otro lado, los betaglucanos, se sabe que son buenos para personas que tuvieran diabetes y colesterol alto”, profundiza sobre los beneficios de su consumo la profesional.

Recetón: tarta de hongos, cebolla y queso

Habitualmente se los consume por ser una gran fuente de proteínas. “Un shiitake o una melena de león tiene bastante proteína, alrededor del 20%, que es lo mismo que tiene la carne. Además, contiene todos los aminoácidos esenciales”, informa la licenciada.

Formas de consumo

Sustentable, económico, con una baja huella de carbono en su forma de producción, son algunos de los beneficios ambientales de la producción de hongos. En el mercado actualmente las variedades más conocidas y de fácil acceso son las gírgolas, el champignon, el shiitake, el portobello y melena de león.

Es importante vincularse con un productor o distribuidor para saber cuáles se producen en la región y evitar riesgos ya que no todos los hongos son comestibles.

“Rellenos para pastas, empanados, en escabeche o salteados para ensaladas. Los hongos se pueden comer asados a la parrilla, se los puede preparar al horno y rellenar con queso tradicional o queso vegetal. Quedan ricos con ajo, perejil aceite oliva aquellos hongos secos, rehidratados.

Destaco en la Patagonia el hongo de pino que es muy rico, de sabor bien profundo y también tiene todos estos beneficios. Van muy bien con risottos o con quinua. Incorporados en las salsas y salteados en ensaladas también quedan muy bien”, sugiere y alienta su consumo la licenciada Eva Henderson.