CALF abandona el servicio de energía en Senillosa

NEUQUEN (AN).- La cooperativa CALF oficializó ayer que abandona el servicio de energía eléctrica que presta en la ciudad de Senillosa, prestación que desde el 1 de marzo quedará en manos del Ente Provincial de Energía de Neuquén (EPEN). Ayer, en una sesión extraordinaria donde hubo fuertes críticas, el Concejo Deliberante facultó al intendente Raúl Béttiga a resolver el contrato con el nuevo prestador.

Tras décadas de prestación del servicio eléctrico ayer un grupo de funcionarios de CALF anunciaron en el Concejo Deliberante de Senillosa que abandonan la localidad por no ser un servicio rentable.

El anuncio se dio en medio de una sesión extraordinaria convocada por el intendente Raúl Béttiga en la que tras una acalorada discusión los concejales del MPN, Vecinalista Auténtica y PJ facultaron al jefe comunal a resolver el contrato con el nuevo organismo prestador.

Según trascendió el servicio eléctrico quedaría a partir del 1 de marzo en manos del EPEN, organismo que ya atendía la zona rural de la localidad. CALF únicamente mantendría el servicio social de sepelios.

Desde la Agrupación Vecinalista por un Cambio el concejal José Galarza criticó la postura del Ejecutivo y aseguró que «una decisión tan importante que afecta no sólo a los vecinos sino a 3.000 socios, que son dueños de esa cooperativa, tiene que ser consultada a la comunidad y no resuelta exclusivamente por el intendente».

Galarza señaló que avalar la retirada de CALF «sienta un terrible precedente ya que de un plumazo quieren borrar a una cooperativa».

Es por esto que indicó que presentarán «una serie de recursos de amparo porque se está dejando de lado la decisión de los socios».

A comienzos de enero el titular de CALF, Marcos Silva, anticipó la decisión de la cooperativa de abandonar la prestación ya que aseguró que debido a una baja tasa de recupero de la facturación el servicio no era rentable. Esta fue precisamente la información que ayer llegó al Concejo de Senillosa donde también un grupo de funcionarios de CALF explicaron que la entidad no estaría en condiciones de hacer frente a las obras de ampliación que demanda la ciudad.

De este modo será Béttiga el que definirá el contrato de concesión que regulará el servicio que comenzaría a prestar el EPEN, documento que deberá ser refrendado por el Concejo Deliberante donde el sector que acompaña a Béttiga tiene amplia mayoría.