Una casa en Roca que actualiza el uso de la entrañable galería
Camino al río Negro, en un barrio cerrado, los propietarios de esta vivienda quisieron un diseño que les permitiera gozarla a full durante las cuatro estaciones.
Ubicada en un barrio de los denominados cerrados de Roca, el emplazamiento de la vivienda responde indefectiblemente a las limitaciones de su reglamento interno y a las necesidades manifestadas por el propietario. Introduce así su reseña el arquitecto Eduardo Fabián García, autor del proyecto.
El lote es irregular de lados no paralelos. Los retiros obligatorios y la elección de sus propietarios de una vivienda en una sola planta inducen a una distribución de bloques independientes que se desplazan intentando interrelacionarse entre sí y acompañando los límites de la parcela.

Los ambientes que componen la vivienda se articulan internamente por una circulación viva, patios interiores y grandes ventanales, que la comunican visualmente con el patio interno.

En números
- 1.100 m2
- es la superficie total del terreno donde se halla implantada la vivienda.
- 350 m2
- es la superficie construida de la casa.

Piscina y galería
La principal premisa es la de una gran galería como eje central de los ambientes públicos, con la interrelación entre ellos, sin más separaciones físicas que amplios ventanales y conformando un espacio único, integrándose además a la pileta que toma protagonismo desde el inicio del recorrido.


El acceso principal a la casa es través de un puente de vidrio laminado con barandas de acero inoxidable que atraviesan un sector de la piscina que caprichosamente rodea la galería y es apreciada desde todos los sectores de la zona de estar.

El dormitorio principal, ubicado al fin del recorrido por el amplio pasillo, se aísla de manera contundente del resto de la casa, con ventanales que no comparten el patio interno y con una mini piscina interna que le brinda una intimidad absoluta.

Los dormitorios de los niños conforman un bloque aislado con autonomía sanitaria y vestidores compartidos.
Comentarios