Viajaron y al volver no estaban sus cosas y había nuevos inquilinos

Desde la fiscalía de delitos contra la propiedad, impulsaron una causa contra la propietaria de un inmueble, por los delitos de usurpación, retención indebida, hurto y daño. Según consta en el expediente, la mujer aprovechó que dos jóvenes estudiantes habían viajado a Salta, lugar de donde provienen, durante las vacaciones de verano, para ingresar a la vivienda que alquilaban, retirar las pertenencias de ambos y volver a alquilar el departamento. La jueza Florencia Caruso dictó el procesamiento de mujer.

Según indicó el fiscal, Guillermo Merlo, que está a cargo de la investigación, la acusación se basa en cuatro hechos: uno por usurpación, el segundo por retención indebida, otro por hurto y el restante por daño.

La mujer que fue imputada es la dueña de varios departamentos ubicados en calle Gabriela Mistral, y según informaron, su actividad se centra en el alquiler de estos. En julio del año pasado dos estudiantes salteños alquilaron uno de sus departamentos. En diciembre ambos viajaron para pasar las fiestas con sus familias. Desde Salta abonaron el alquiler mediante una transferencia bancaria, pero al regresar a Cipolletti se encontraron con que la propietaria había ingresado a su residencia, retirado todas sus pertenencias y alquiló nuevamente el lugar a otras personas.

Ante esta situación, los damnificados intimaron con una carta documento para conseguir la devolución de sus bienes, pero la mujer se negó a entregarlas. Tras radicar una denuncia penal, desde la fiscalía solicitaron un allanamiento para recuperar lo sustraído. Se recuperó así parte de los bienes y muebles de los jóvenes norteños, pero gran parte de su propiedad estaba dañada, ya que había sido abandonado a la intemperie. Inclusive algunos electrodomésticos, muebles y un colchón estaban siendo utilizados por la procesada y por los nuevos inquilinos.

Durante el proceso judicial se recabaron varios testimonios en los cuales, vecinos del lugar confirmaron los hechos y comentaron que la misma mujer ya había realizado acciones similares con anterioridad. Basándose en estas pruebas, la jueza Florencia Caruso, resolvió dictar el procesamiento de la mujer mayor de 70 años.