Volvió la calma al penal de Bariloche tras los incidentes
Los disturbios ocurrieron esta mañana en el pabellón 1. Defensores oficiales y el fiscal de Ejecución Penal se presentaron y escucharon los reclamos de los internos, que habían quemado colchones.
Como la sentencia quedó firme, el hombre condenado fue detenido y enviado a la cárcel de Bariloche a cumplir la pena. (Foto de archivo)
En el penal 3 de Bariloche se recuperó la calma tras los incidentes que ocurrieron esta mañana de jueves.
El fiscal de Ejecución Penal Guillermo Lista, informó esta tarde de jueves que se restableció la tranquilidad después de que escucharan los reclamos del grupo de internos del pabellón 1.
Los personas detenidas protestaron para que se mejoren las condiciones de encarcelamiento y para que se modifique el estricto protocolo sanitario que está vigente desde mediados de marzo pasado hasta la fecha, para prevenir posibles contagios de la COVID-19 en el penal.
Reclaman, por ejemplo, salir al patio más de una hora al día, como se les permite hasta el momento para garantizar el distanciamiento social. Ocurre que las 23 horas restantes, los internos las deben pasar en las celdas y pabellones.
Otro reclamo es por las malas condiciones en que reciben los alimentos que les dejan sus familiares que también deben cumplir un protocolo sanitario. Por el protocolo están suspendidas desde marzo las visitas de los familiares y amigos.
Lista informó que algunos internos habían quemado colchones que arrojaron al pasillo del pabellón 1 y también agua como forma de protesta. La humareda se extendió por casi todo el establecimiento.
A raíz de la violenta protesta, personal del grupo especial del penal intervino para disuadirlos y usaron munición antitumulto. Los incidentes no se extendieron al resto de los pabellones ni celdas, donde los internos no se sumaron a los reclamos.
Lista se presentó alrededor de las 14, con los defensores oficiales Marcos Cicciarelo y Marcos Miguel y el presidente del Comité Contra la Tortura Municipal, Ezequiel Palavecino, para constatar la situación.
Allí, escucharon la protesta de los internos que además denunciaron una presunta represión por parte del personal penitenciario que intervino en el procedimiento para retomar el control del penal.
Sin embargo, el fiscal y Palavecino sostuvieron que no hubo internos lesionados por el accionar del grupo especial. De todos modos, Lista aseguró que pidió al médico del penal que haga un informe.
La jueza de Ejecución Sandra Ragusa estuvo al tanto de la situación, pero no concurrió a la unidad penitenciaria por razones de salud, explicó Lista.
La semana pasada, los cuatro defensores oficiales de Bariloche presentaron un hábeas corpus colectivo a favor de los internos del penal y pidieron a Ragusa que le requiera informes a la dirección del penal sobre las condiciones de detención de los presos.
Lista explicó que el personal del penal aplica el protocolo sanitario a los alimentos para prevenir posibles contagios. También, los revisa porque hubo intentos de ingresar estupefacientes ocultos, por ejemplo, en el fondo de un pote de dulce de leche.
Palavecino dijo que la visita al penal sirvió para constatar las denuncias que habían recibido por las condiciones de detención. Y sostuvo que tras escuchar sus planteos, los internos se calmaron.
En el hábeas corpus presentado por los defensores oficiales se solicitaba a la jueza de Ejecución Penal que requiera informes a la dirección de la cárcel local.
En el recurso judicial, los defensores advirtieron que pedían saber si alojaron internos en celdas que están clausuradas, sin agua caliente para higienizarse, y comida con restos de excrementos de roedores, informaron fuentes judiciales.
Recordaron que la ley que regula en la provincia el hábeas corpus prevé que esa respuesta debe ser en un breve plazo. Sin embargo, hasta el momento nadie respondió. Por eso, Ragusa intimó a la dirección del penal a responder los requerimientos en un plazo de 24 horas.
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