Ídolos sin fecha de vencimiento

Río Colorado

Los 30 años suelen ser la edad límite fijada para los futbolistas para colgar los botines. Sin embargo, existen jugadores que a su preparación física y su calidad técnica, pueden darse el lujo de seguir activo sin tener diferencias y compitiendo de igual a igual con adversarios mas jóvenes.

Lucas José Millán delantero y goleador de 36 años y Nelson Rubén “Piojo” Otegui, aguerrido defensor de 42 años, continúan manteniendo su vigencia en el primer equipo de Independiente de Río Colorado, vistiendo y defendiendo la camiseta roja tanto los partidos del fútbol local, como en el Federal B.

Además cuentan con el reconocimiento de sus propios compañeros, como la de sus adversarios, por su lealtad, esfuerzo y compromiso con la disciplina.

Incluso son los últimos dos jugadores del primer equipo del Rojo que en 1998 comenzó a transitar por los torneos naciones, Torneo del Interior, Federal C y B, Copa Argentina.

Ambos referentes en los vestuarios y con más de una veintena de vueltas olímpicas, al hablar de fútbol muestran un entusiasmo envidiable que pareciera estar escuchando a un joven de 18 años. Dentro de la cancha se los puede ver calentarse si no están jugando bien o si el equipo no funciona y protestan ante alguna jugada dudosa.

Además están pasando un buen momento futbolístico que ni hablan de un cercano retiro de la actividad, aunque mantienen un lema en común.

“Para dejar el fútbol, lo tenemos que hacer cuando se está pasando un buen momento, a modo personal y también como equipo. No lo contrario”, señala Lucas Millán. “La clave principal es tener responsabilidad y constancia en los entrenamientos”.

Si ellos lo dicen , habrá que creerles.

El artillero histórico del Rojo

Estará en los libros históricos del club como máximo artillero y recordado por propios y adversarios por marcar goles espectaculares en partidos claves que llevaron al club a ganar títulos locales o salvar al rojo del descenso del Federal B.

El delantero goleador, se ganó el puesto luego de mucho sacrificio en su juventud. “Cuando estudiaba en Bahía Blanca o en La Plata, me venía los fines de semana a jugar con mis amigos.” recuerda con nostalgia, que en sus inicios su puesto era de volante. En sus primeros partidos en primera en cancha de Buena Parada debutó con la camiseta 11, marcado 3 goles y desde entonces se mantiene como delantero, jugando en todos los frentes.

En casi 30 años jugando para exclusivamente en Independiente, dejó de lado por distintos motivos infinidades de ofertas para seguir en la carrera en Bahía Blanca, el Alto Valle o La Pampa, pero nunca le dijo no al Rojo.

A los 20 años en su punto más alto, fue el terror de los arqueros, donde llegó a marcar casi todos los partidos entre 3, 4 y 5 tantos, siendo por varios campeonatos locales el máximo goleador de la liga, registros que será difícil de superar.

“Siempre le digo al “Oso” (Adrián Sandoval, compañero de equipo) vos me tenés que decir, cuando me veas que no estoy bien dentro de la cancha. Ese será el momento para no jugar más. No quiero padecer jugar el fútbol, quiero seguir disfrutando del deporte que más me gusta.”

Un ejemplo de su temperamento especial dentro de la cancha, fue lo evidenciado frente a Germinal de Rawson, cuando marcó el 1 a 0 para su equipo y no lo festejo. “Como lo iba a festejar si estaba jugando horrible. No daba para festejar”, reflexionó.

En el ámbito local la victoria que más disfruta es cuando le ganan a su eterno rival, Atlético, al que más del 70% de los enfrentamientos siempre le marcó goles.

El más veterano del Federal B

El Piojo, con 42 años, es el jugador amateur más veterano en plena actividad en el Federal B. Su cuna fue Villa Mitre donde fue parte del último título logrado por el club. También tuvo un paso por Atlético, y llegó a Independiente como refuerzo y se quedó. Lleva más de 18 años defendiendo con uñas y dientes la camiseta actual.

Igual que su compañero Millán, no tiene en mente abandonar la actividad del fútbol. ”Todavía me pasa que llega la hora de ir a entrenar y voy. Si tengo que ir a las 2 de la tarde, allá estoy. Todavía siento las mismas ganas que cuando era más pibe. Y jugar en el Federal B, con jugadores de otra categoría y ver que estamos casi a la misma altura… Eso te motiva mas.”

“Cuando vea que me superan de todos lados y que estoy haciendo agua, ese día doy un paso al costado”, dijo el Piojo Otegui.

El experimentado defensor añadió que está pensando en el momento de su retiro, pero no se imagina como calmará la ansiedad de no estar adentro de la cancha.

“Lucas y el Piojo representan para esta hermosa disciplina valores, esfuerzo, sacrificio y técnica al servicio del equipo”.

Eduardo Labiano fue técnico de ambos durante años en Independiente.

“Con ambos pude compartir muchas cosas. Con el Piojo jugamos juntos en Villa Mitre. A Lucas lo disfruté como DT. Es un distinto”.

Walter Ríos, DT de Buena Parada, y sus vivencias con Millán y Otegui.

“Dirigir jugadores como Lucas y Nelson es una experiencia maravillosa. Lo resumo así: tienen humildad y son buena gente”.

La definición del actual DT de Independiente, Jorge “Pulpo” Lencina.

Números

insuperables