La Marcha del Orgullo en Neuquén pidió menos violencia y más derechos

Una vez más se pusieron las plumas, se pintaron la cara de ocho colores, usaron los brillos y marcharon para abrir más caminos. La Marcha del Orgullo tuvo ayer su edición número XVII para pedir que termine la violencia contra el colectivo LGBT, por una ley antidiscriminatoria y para reivindicar los derechos obtenidos a lo largo de los años.

Pasadass las 18, Ayelén Farías y sus amigas lesbianas, artistas y activistas montaban una estatua de una amazonas gigante de tres patas frente al monumento a San Martín. Estaba enmarcada con fotos de la resistencia que les habían mandado desde ciudades de la región y afirmaban que estar ahí, un año más, era importante.

“Se conquistaron muchos derechos que a veces parece que hoy penden de un hilo. Pese a eso nos siguen maltratando, nos golpean, nos echan de los trabajos, de nuestras casas, nos matan”, decía Ayelén.

Era un día para celebrar la diversidad, en el que muchos se habían vestido con sus mejores atuendos, otros habían preparado sus banderas o canciones. Pero también era un día para reclamar.

“Hay un avance lamentable sobre los sectores populares y postergados. Sobre todo las mujeres trans somos perseguidas, encarceladas y hay un protocolo firmado por la ministra Patricia Bulrrich, que atrasa muchísimo”, decía Ornella Infante de la Asociación de Travestis Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTTA).

Ante esto, impulsan la ley integral trans. El proyecto que presentó la diputada rionegrina Silvia Horne contempla puntos entre los que está el cupo laboral trans, la reparación histórica a las que sufrieron la violencia institucional, que fueron torturadas en democracia y en dictadura. Además de otras políticas públicas que les permitiría estar insertas en la sociedad, derribar la barrera que las margina y las lleva a tener una expectativa de vida de alrededor de 40 años.

En la manifestación, como todo los años, volvió a imperar la música, el baile y la libertad. Al ritmo de la comparsa, salieron a las 19 desde el monumento y formaron una columna de cinco cuadras. Al pasar frente a la iglesia, las vallas los mantenían lejos del edificio y la policía se aseguraba de que nadie pase. Aún así, dedicaban sus canciones para pedir el acceso al “aborto legal en el hospital”.

La columna dio una vuelta por la avenida Argentina, volvieron al monumento y finalizó en el Parque Central donde se hizo el Festival de la Diversidad con la actuación de, entre otros, la Tía Marilú.

La movilización mostró una nutrida participación que ocupó unas cinco cuadras y partió desde el monumento a San Martín.

juan thomes

Plumas, brillos y colores, parte del festejo en las calles locales.

juan thomes