Detectaron el origen del mal olor en el Durán

El municipio de Neuquén clausuró ayer un caño que vertía líquidos cloacales al arroyo Durán y funcionarios denunciaron que se trata de un ducto de bombeo perteneciente al EPAS. La irregularidad se detectó sobre el curso de agua a la altura de la calle Palpalá, tras la denuncia realizada por vecinos del barrio Río Grande que se conoció el 13 de junio pasado.

Luego de varias horas, el EPAS hizo una denuncia policial porque indicó que el ducto estaba autorizado y que su clausura, ante un eventual desperfecto, “se vería afectada la población del sector aledaño al bombeo, con el retroceso de los efluentes en sus domicilios”.

El EPAS efectuó una denuncia policial “por la negligencia con la cual se ha operado en las instalaciones cloacales, poniendo en peligro la salud de la comunidad”.

Luego de un verano cargado de polémicas en torno a la contaminación de los ríos y la clausura del balneario municipal Albino Cotro durante toda la temporada, debido a los altos niveles de presencia de la bacteria escherichia coli, el arroyo Duran vuelve a aparecer en el ojo de la tormenta.

En la mañana de ayer, la subsecretaria de Medio Ambiente de la comuna, Silvia Gutiérrez, informó que tuvieron denuncias de los vecinos por los olores que emanan en este lugar y detectaron un caño que salía de la planta de bombeo.

La funcionaria apuntó directamente contra el EPAS al manifestar que el ducto en cuestión “está justo proviniendo de un bombeo que tiene el EPAS y es de líquidos cloacales, por lo tanto la presunción es que descarga directo en el Durán sin tratar, y en consecuencia después va directo al río Limay”.

La anterior observación la había hecho el Municipio contra el organismo provincial por el volcado de líquidos al arroyo de la calle Bejarano.

Detectaron el origen del mal olor en el Durán