Sólo un movil para 155 internos en el Penal 5

Disponen de una camioneta para todos los traslados de presos, lo que hace que muchas veces no lleguen a las audiencias de juicios, que se terminan suspendiendo.

Una verdadera odisea se vive en el Establecimiento Penal 5 de esta ciudad cuando se debe trasladar a los internos. Esto se debe a que sólo se cuenta con un móvil y esta situación genera que la mayoría de las veces no llegan a tiempo a las audiencias de juicio y que se terminan suspendiendo, o que deban elegir a quienes llevan debido a que se convocan a diferentes internos en un mismo horario en diferentes ciudades. A esto se suma que muchas veces la camioneta que tienen a su disposición sufre desperfectos mecánicos que provoca que por uno o dos días no puedan usarla.

“Estamos esperando a que trasladen a los internos”, “El móvil se rompió”, “Tuvieron que llevar a un preso a Roca y avisaron que no van a llegar”, son algunas de las frases que suelen escucharse en los pasillos de Tribunales.

Las causas de por qué no pueden llegar a tiempo a donde se solicitan un traslado son siempre las mismas: giran en torno a que hubo una superposición en horarios de audiencias de dos presos, que la camioneta se rompió, que no tiene combustible o bien que debieron viajar hasta otra ciudad.

Sin dejar de lado las urgencias cuando un preso debe ser trasladado al hospital Pedro Moguillansky ya que dentro del penal no cuenta con un centro de salud y tampoco médicos.

Una situación que refleja lo que ocurre cotidianamente se dio la semana pasada. Un agente penitenciario, que prefirió no dar su identidad por miedo a represalias, contó a “Río Negro” lo que pasó: “La semana pasada había que llevar a un recluso a Neuquén a las 9:30 a una audiencia y a las 10 teníamos que llevar a una interna que tenía turno en el hospital. Pese a que tratamos de cumplir con todo es imposible”, indicó. Esto provoca que los juicios sufran retrasos y que el proceso penal se extienda por semanas y, a veces, hasta meses.

Otro de los grandes inconvenientes ocurre cuando la camioneta sufre un desperfecto mecánico y que es muy común que suceda, según indicó la misma fuente. “Lo que pasa es que por el mal estado de los caminos que llegan hasta el penal es muy común que la camioneta se rompa. Entonces tenemos que pararla uno o dos días para repararla”, sostuvo.

Una alternativas es solicitar a las comisarías de la ciudad apoyo para poder realizar el traslado, pero muchas veces sucede que tampoco tiene la disponibilidad de un móvil. Sin soluciones a la vista, desde el Penal cipoleño señalaron que se trata de cubrir todos los trasladaos con el escaso recurso que tienen.

Como el vehículo ya tiene varios años y mucho uso, se rompe bastante seguido y eso también complica los traslados de los internos.

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Como el vehículo ya tiene varios años y mucho uso, se rompe bastante seguido y eso también complica los traslados de los internos.

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