Un jurado popular declaró a tres hombres culpables de matar a Maier

“Nosotros, el jurado, encontramos al acusado González Vicente Isaac, culpable en carácter de autor de homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma de fuego, por haber dado muerte a a Roberto Gustavo Maier”, así la presidente del jurado popular integrado por 12 personas comenzó de leer el veredicto, por el homicidio de Maier ocurrido el 13 de enero pasado en el paraje rural China Muerta.

Los tres imputados por el hecho, Vicente González, Aarón Lizama y Juan Carlos “Calilo” Fuentes, fueron encontrados responsable del mismo delito, en calidad de coautores. Es la calificación legal que había solicitado el fiscal jefe Agustín García y el abogado querellante de la familia, Juan Manuel Coto, en sus respectivos alegatos de cierre, que se habían realizado en la mañana.

Al igual que todo el desarrollo del juicio, Isabel Gallegos esposa de Maier, se sentó en la primera fila del público. Pero en esta oportunidad, cuando el jurado ingresó a la sala por última vez, se tomó el rostro con ambas manos y escuchó cada palabra que se pronunció en el recinto inmutable. Recién cuando la presidente del tribunal integrado por 12 personas terminó de leer el documento de la sentencia, recién allí, la viuda balbuceó y con un pañuelo que sujetaba con firmeza comenzó a secar las lagrimas que cayeron por sus mejillas.

El veredicto se conoció a las 19, luego de cinco horas de deliberación a puertas cerradas. Debían determinar las responsabilidades por el crimen de Maier, quien fue herido con una bala calibre 22 en su cuello durante una entradera en su hogar y falleció tres días más tarde por un infarto cerebral. La bala le destrozó la artería carótida izquierda y pese a que fue sometido a una cirugía exitosa en el hospital Castro Rendón, las secuelas provocadas por la perdida de sangre fueron irreversibles.

El defensor Gustavo Barroso, representó a Fuentes y había solicitado una condena por robo en despoblado y en banda. Carlos Vaccaro, abogado particular de González y Lizama, pidió la misma calificación para el primero y la absolución para el segundo.

Sobre el veredicto el fiscal, Agustín García, sostuvo que “estábamos convencidos de que son estos tres y sabemos que en el juicio surgieron elementos para saber quién es el cuarto involucrado”, en relación a un cuarto sospechoso que aun no fue identificado.

Agregó que “indudablemente estamos conformes y el jurado ha sabido interpretar la prueba que le llevamos y la acusación que realizamos, se ha aplicado lo que creemos que es justo para el hecho que cometieron estas tres personas”.

En tanto, la esposa de Maier, sus hijas y los vecinos de China Muerta que acompañaron el juicio, también manifestaron su conformidad, entre un mar de lágrimas y abrazos que se fundieron dentro de la misma sala de audiencias, aún cuando el jurado permanecía dentro del recinto. Los familiares prefirieron llamarse a silencio y compartieron el momento con mucha emotividad.

Los tres imputados, no estuvieron presentes durante la audiencia, solo sus familiares.

Sobre las penas que podrían caber, el fiscal detalló que la mínima que prevé la escala penal va desde 13 años y cuatro meses, hasta los 33 años y ocho meses. “Nosotros solicitamos juicio por jurados y nuestra pretensión de pena ya es superior a los 15 años. Ofreceremos la prueba para la audiencia de cesura y vamos a ver si obtenemos el monto que creemos que corresponde “, finalizó.

“Estimo que la Oficina Judicial podrá fijar la audiencia de cesura para determinar la pena este mes. Estimamos que será antes de fin de año”,

manifestó anoche el fiscal jefe de Homicidios, Agustín García.

Vecinos de China Muerta celebraron el veredicto

Un grupo de vecinos del paraje rural China Muerta celebró ayer el veredicto del jurado popular en las puertas de las salas de audiencias de Antártida Argentina al 350. Manifestaron que el crimen de Roberto Maier conmovió al sector y que provocó que la gente se movilice para conseguir más seguridad en el alejado lugar, que depende del municipio de Plottier.

Durante toda la semana que se desarrolló el juicio, los vecinos acompañaron a la familia y demostraron un gran afecto hacia el hombre fallecido.

Walter Liendro, referente del grupo, indicó que luego del fatal episodio el gobierno tuvo que responder a la demanda de la gente y aseguró que varios meses atrás ya reclamaban seguridad.