Sumarian a 30 hospitalarios en Allen

Más de 30 sumarios se iniciaron entre el personal del hospital de Allen para deslindar responsabilidades sobre la investigación periodística que publicó “Río Negro”, en la que varios testimonios involucran a un médico en prácticas abortivas y cobros fuera del centro de salud, pero adentro se da una llamativa cantidad de legrados.

La directora del hospital dijo que no pondrá “las manos en el fuego” por nadie. Así respondió cuándo se la consultó por el médico ginecólogo sospechado de realizar abortos.

“Puse a disposición todo el hospital para que sea investigado. No tenemos nada que ocultar, se trabaja bien y cada uno tendrá que hacerse cargo de lo que hace”, señaló ayer Ana Senesi, directora del hospital Dr. Ernesto Accame de Allen. La funcionaria cuestionó la investigación de “Río Negro”, la calificó como “desagradable” y dijo que “parece una biografía del doctor Elena que nos involucra como hospital”.

“Yo no pongo las manos en el fuego por nadie”, respondió Senesi al ser consultada por el ginecólogo sospechado de llevar adelante las prácticas abortivas, Guillermo Elena, quien había sido nombrado por ella como parte del equipo de conducción del hospital. Senesi, que luego de que se publique la investigación periodística revisaba los libros de quirófano para determinar a qué se debió cada legrado practicado en ese área, reconoció ayer que no pudo finalizar dicha tarea porque una fiscal se llevó del hospital toda la documentación.

“Es injusto que se involucre a todos pero es la única vía (la de elevar los sumarios) para que esto se esclarezca y sigamos adelante tranquilos”, indicó la directora al referirse a la investigación administrativa que se abrió hacia adentro del hospital. Los sumarios alcanzaron al personal del quirófano y de otros sectores como la guardia. Las denuncias judiciales de la directora del hospital y del Ministerio de Salud, tramitan en la Unidad Fiscal Temática Nº 5 de General Roca.

Senesi insistió en la que la investigación tuvo la intención de dañar a Elena y consideró que el hospital “quedó en el medio” pero prefirió el silencio cuando se le preguntó de quién tenía sospechas, si de algún gremio o de otros profesionales médicos. Sin embargo reconoció que una vez, no hace mucho tiempo, le llegó un comentario sobre las presuntas prácticas abortivas que apuntaban a “casi lo mismo que salió publicado. No puedo actuar por un rumor de pasillo, tiene que haber algo escrito porque sino entramos en una persecución”, manifestó.

Como parte del efecto que causó la investigación periodística, la directora del hospital ofreció su renuncia al cargo pero el gobierno provincial no se la aceptó y obtuvo el respaldo de las máximas autoridades.

El médico Guillermo Elena seguirá trabajando en el servicio de Ginecología del hospital. La cartera de Salud pidió investigar.

“Somos gente de trabajo, queremos defender nuestra labor y la seriedad que hemos construido durante años”, dicen los empleados.