Acampar en Mari Menuco para Semana Santa: el lago lindo y cercano

Dicen que un chapuzón en el Mari Menuco ayuda a calmar el ritmo de una semana complicada, que sentarse a la sombra de un árbol a escuchar los pájaros es como un masaje al espíritu. Si alguien va a pasar la noche en el lago, podrá ver los atardeceres más lindos cuando el sol se esconde en el horizonte y el celeste del cielo se pone colorado.

Es por eso, y porque está cerca de grandes ciudades de Río Negro y Neuquén, que este verano muchos eligieron ir a pasar la noche en el Camping Mari Menuco y disfrutar unos días de vacaciones, a poca distancia de casa, pero en un marco completamente diferente. Y como todavía hace calor, la gente sigue llegando.

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Alfredo Santángelo es el propietario del camping. Hace 17 temporadas que recibe a los turistas en ese lugar, en el que el agua se combina con la buena sombra de los álamos y pinos que hay sobre la costa y que él cuida celosamente.

“El 80% de las personas antes venían a pasar el día, llegaban el sábado temprano, o el domingo, y a la tarde se iban. A partir del año pasado, muchos comenzaron a venir a acampar los fines de semana y este año, se dio que venían en la semana, con tres o cuatro días de pernocte”, comenta Alfredo .

Lindo, cerca, que la ruta 51 sea una buena vía de ida y vuelta, que las temperaturas sigan ideales, son algunos de las virtudes que Alfredo nombra. Cuando se le pregunta por la temporada de otoño que se viene, sostiene que si bien disminuye la cantidad de turistas, la gente sigue yendo.

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“Para esta época, el acampante un poco desaparece y aparecen los que vienen a pasar el día, a comer un asado. En marzo ya abrimos solo sábados, domingos y feriados. Después de tantos años tenemos nuestra clientela. Hasta Pascuas estará abierto con este sistema”, dice Santángelo.

Alfredo sale en su lancha y recorre el lago de lo profundo a la orilla. Piensa en ese recorrido para responder qué es lo que más le gusta. Dice que las playas de arena son muy lindas, o las costas con acantilados y rocas que muchos prefieren. Nombra al famoso lago Los Barreales, que queda pegado, y se llena de jóvenes con su música. Está seguro que la tranquilidad de su lugar es un imán para muchos.

“Nunca tuvimos problemas de delincuencia, en todos estos años, llamamos solo dos veces a la policía, una vez por un perro y otra por un conflicto matrimonial de unos acampantes. Eso es algo que Mari Menuco le da a la familia, que es diferente a los balnearios populares de la zona”, relata.

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Santángelo está instalado en ese lugar hace 42 años. Tiene 71 y cuando llegó desde Buenos Aires a Neuquén, viajar 40 minutos para ir a trabajar no le pareció una locura. Eso le daba la posibilidad de vivir rodeado de naturaleza, seguro y con el lago en la puerta de su casa para salir a pescar.

“Me gusta mucho pescar y elegí esta vida. Acá sacamos pejerrey y perca. Pesco bastante y como conozco trato de no fracasar. La mayoría se embarca, o agarra su canoa para hacer unos metros y ya se puede pescar bien”, invita.

Al lago Mari Menuco, se accede por ruta 51 y al recorrer más de 40 kilómetros desde la intersección con ruta 7 comienzan los distintos accesos. Para llegar al camping la distancia es de unos 45,5 kilómetros, justo después de la entrada al Club de Caza y Pesca Mari Menuco. Para respetar a los que no les agradan, el camping decide no aceptar perros y tiene un reglamento que se debe respetar, que va con el ticket de ingreso.