Aire polar: sigue la nieve en la cordillera con períodos de viento intenso
Un nuevo sistema frontal afecta la región cordillerana con lluvias y nevadas. Para mañana se esperan ráfagas de hasta 100km/h en el este y norte de Neuquén. El fin de semana comienza a subir la temperatura.
Gran parte del país se ve afectada por una ola de frío polar durante esta semana.
Después de transcurrido más de la mitad del invierno, la posición del anticiclón del Pacífico permite que sistemas de baja presión avancen sobre la región. Este martes se inició con aire frío de origen polar dominando la situación sobre el norte de la Patagonia dando lugar a heladas de variada intensidad.
Durante el resto de la semana se espera que una serie de sistemas de baja presión cruce por el centro de la Patagonia lo que producirá períodos recurrentes de viento intenso.
Por caso, un profundo sistema de baja presión avanzará durante el final del miércoles e inicio del jueves dando lugar a ráfagas que pueden superar los 100 km/h especialmente sobre el este y norte de Neuquén.
Este sistema sumará un nuevo pulso de aire frío con nevadas hacia la cordillera. La sumatoria de nieve acumulada y viento en declinación permitirá que se produzcan temperaturas muy bajas sobre la línea sur en la madrugada del viernes.
En contraste, hacia el fin de semana se estima que el aire más frío se recluirá más al sur, y aire más templado avance sobre la región con temperaturas que pueden rozar los 20 °C en los valles hacia el sábado y superiores a los 22 °C.
También hacia el fin de semana se espera ascenso de temperatura hacia la cordillera, con valores que pueden superar los 15 °C en el caso de Bariloche el próximo domingo, lo que aceleraría el proceso de deshielo de la nieve acumulada en zona de montaña, especialmente en cotas medias y más bajas.
Ese calentamiento persistirá la próxima semana con máximas por encima de los 24 °C en los valles y arriba de 14 °C en la zona cordillerana. Septiembre podría iniciar con temperaturas primaverales, que podrían alcanzar o superar los 25 °C en los valles y los 18 °C en la cordillera. Pero un nuevo sistema frontal aportaría tormentas sobre la costa y aumentaría las chances de lluvias ingresando desde la cordillera.
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