Altas penas por un frustrado pero violento asalto en Bariloche

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Bonnefoi aceptó su culpa en un juicio abreviado y le dieron seis años y tres meses más.

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La Cámara Primera del Crimen homologó el acuerdo alcanzado en un juicio abreviado por el fiscal Carlos López y los imputados y le impuso seis años y tres meses de prisión a Fabio Bonnefoi (20) por un violento robo con armas que quedó en grado de tentativa. Sus dos cómplices en la ocasión, Ricardo Lepín (26) y Walter González (19), fueron condenados a 5 años y 9 meses de prisión por su participación en un hecho en el que balearon al damnificado y a su hijo cuando los perseguían. Pese a que el robo quedó en grado de tentativa, porque fueron recuperados enseguida todos los elementos sustraídos, fue alta la pena requerida por el fiscal a raíz de la conducta salvaje que desplegaron en la persecución a los damnificados, con el afán de asegurarse la impunidad. El hecho se inició a las 15 del 21 de marzo de 2011 frente al complejo de cabañas “Amulén”, ubicado sobre la Ruta 40, entre los lagos Gutiérrez y Mascardi, cuando Ramiro Andrade regresó con su mujer y un hijo a su domicilio, a bordo de su camioneta, y advirtió la presencia de tres individuos que se movilizaban en un Ford Escort. Andrade ya había ingresado al predio, pero retrocedió y trató de escapar cuando se acercó uno de los desconocidos, y comenzaron a perseguirlo y a disparar contra su camioneta para evitar su fuga. Con uno de los disparos acertaron en el brazo derecho de Andrade y otro hirió a su hijo en una mano, pese a que se protegía junto a su madre en el piso del rodado. Mientras era perseguido, Andrade se comunicó con la Policía y orientó a los uniformados hasta el pinar donde se ocultaron con el auto. Allí fueron detenidos Bonnefoi y González. Lepín, habitual conductor del Escort, logró escapar en ese momento pero fue detenido poco después. Bonnefoi ya cosechó varias condenas en poco tiempo, luego de cumplir los 18 años, y protagonizó varias fugas, incidentes y un motín en la cárcel de Bariloche.