Pidieron perpetua para los tres acusados del homicidio de Castillo

El fiscal Martín Pezzetta solicitó la prisión perpetua para Oscar Fabián Fuentes, Carlos Manuel Fuentes y Lucas José González, quienes están acusados del homicidio de Diego Antonio Castillo, el cual sucedió en febrero del año pasado.

Es así que en la exposición de alegatos, Pezzetta consideró que la prueba con la que se cuenta es suficiente para condenar a los imputados, y además enfatizó que “las declaraciones testimoniales del padre de Castillo y de un testigo presencial resultaron fundamentales para tener por acreditado el caso”. En ese sentido valoró como prueba indiciaria y de gran relevancia dos testimonios que brindaron algunas personas, a quienes se les reservó su identidad.

Por otra parte, la calificación legal sobre la cual el fiscal basó su pedido es la de homicidio calificado por el uso de arma de fuego y agravado por la participación premeditada de dos o más personas. Se identificó como autor material a Oscar Fuentes, mientras que los coautores funcionales habrían sido, acorde a la hipótesis fiscal, Lucas González y Carlos Fuentes.

Tal cual se describió en la audiencia, el hecho ocurrió en Cinco Saltos el 7 de febrero de 2015, aproximadamente a la una de la madrugada, momento en que los acusados arribaron al domicilio de la víctima, el cual está ubicado en la calle Sargento Cabral al 1200. Así fue que en estas circunstancias, tocaron el timbre de la vivienda, y al abrir la puerta Castillo, para atenderlos, recibió cuatro disparos de un arma de fuego calibre 45, la cual era portada por Oscar Fuentes, y que le provocaron la muerte de forma inmediata.

No obstante, en cuanto a Lucas González, el fiscal consideró que cumplió la función de “campana”, mientras que Carlos Fuentes intentó asegurar la impunidad de los otros acusados retirándolos rápidamente de la escena del crimen, ante lo que su participación resultó de relevancia en el crimen.

“Durante la etapa de instrucción y las audiencias que se realizaron en el juicio considero que quedó probado quienes fueron los autores”, concluyó Pezzetta.

Por parte de la defensa, el abogado Mendaña bregó por la absolución de los imputados, alegando que no existía prueba objetiva, en tanto que sobre la subjetiva, es decir las declaraciones testimoniales, argumentó que la única persona que vio como sucedió el hecho fue el padre de la víctima, quien declaró en cinco oportunidades y en la primera de las cuales dijo que no reconoció ningún rostro.