Pereyra sobre el “blindaje” a Vaca Muerta: “Nadie está obligado a sumarse”

En el patio del auditorio de Casa de Gobierno, ayer se permitió todo. El ingreso de cientos de trabajadores petroleros y de la construcción, cánticos de cancha, el uso de pirotecnia y bombos. Ese fue el escenario que el gobierno provincial eligió para firmar el “blindaje” a Vaca Muerta, un acuerdo con los sindicatos y las cámaras empresarias para evitar medidas de fuerza en los yacimientos no convencionales.

El llamado “marco de entendimiento sectorial” sellado ayer no hace más que ratificar parte de la adenda del Convenio Colectivo de Trabajo firmada en enero de 2017. Particularmente, el rol de la Comisión Especial de Interpretación y Resolución de Conflictos como instancia de gestión conciliadora para evitar que se tomen medidas de fuerza. Es que el acuerdo compromete a los sindicatos a no realizar ni convocar medidas de acción directa de carácter nacional o provincial que puedan afectar la actividad de los no convencionales, pero garantiza que, si se tomase esa decisión “como último recurso”, el reclamo deberá canalizarse antes a través de la comisión.

“En este convenio estamos diciendo que si se genera alguna fricción, no es parando Vaca Muerta como la vamos a solucionar, sino sentándonos en una mesa como lo venimos haciendo. El diálogo es la herramienta”, afirmó el gobernador Omar Gutiérrez, quien aclaró que el acuerdo “no pretende sacar ventaja de la clase trabajadora”.

“Este convenio viene a afianzar el empleo y el compre local. Si había alguna excusa para que no inviertan, ahora se acabó: a producir y a generar puestos de trabajo”, sostuvo.

El mandatario fue uno de los firmantes junto al ministro de Trabajo, Mariano Gaido, los secretarios generales de Petroleros Privados, Guillermo Pereyra; de Petroleros Jerárquicos, Manuel Arévalo; y de la Uocra, Víctor Cárcar. El “blindaje” tuvo por protagonistas también a la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) y a la empresa de servicios Halliburton.Si bien se había anticipado que el gobierno nacional formaría parte del acuerdo, se terminó de resolver en el ámbito doméstico.

La movilización de trabajadores a Casa de Gobierno colaboró para darle al acto un marco de campaña que el senador del MPN no disimuló. Pereyra le dedicó halagos al gobernador, a quien ubicó como “un dirigente sindical más” por su “defensa de la comunidad petrolera”, y convocó a “rebasar las urnas de voto azul” en la interna partidaria del 25 de noviembre.

Los obreros vitorearon cada discurso, pero también entonaron el viralizado cántico contra el presidente Mauricio Macri, algo que puso incómodos a los funcionarios arriba del escenario. “Los compañeros son los que han salido esta mañana de los turnos. Si hubiéramos movilizado a todos, tendríamos a 15.000 trabajadores apoyando”, calculó Pereyra.

Se busca que en caso de que exista una medida nacional no se replique en la Cuenca Neuquina sólo entre los trabajadores de los no convencionales.

“Este acuerdo va a recorrer el país y el mundo. Ya está llegando a la Meca del desarrollo hidrocarburífero, Houston”.

El entusiasmado gobernador Omar Gutiérrez.

Los camioneros

estuvieron ausentes

El “blindaje” para Vaca Muerta se firmó ayer sin una pata sindical, la del gremio de camioneros.

La organización que lidera Carlos Roja había anticipado la semana pasada su oposición al acuerdo y fue la postura que mantuvo ayer con su ausencia en el acto.

“Camioneros no se quiso sumar, pero tendrá sus razones. Nosotros no vamos a denostar este tema, seguimos adelante con nuestra actividad”, evaluó el petrolero Guillermo Pereyra al ser consultado por la prensa.

En cambio el titular de Uocra, Víctor Cárcar, aportó su firma al “blindaje” y analizó el acuerdo como “un hito histórico, el puntapié inicial para cuidar Vaca Muerta”.

“Seamos inteligentes y defendamos esto con capacitación y diálogo”, pidió.