Avellaneda en llamas

juan mocciaro jmocciaro@rionegro.com.ar

¿De qué se reirá ahora Racing, que su proyecto deportivo le estalló en las manos? Se rió hasta el mal gusto del descenso de Independiente y quizás se siga riendo, pero será de la boca para afuera. ¿Qué se dirá para sí mismo ahora que le interesan los mismos técnicos que Independiente? De la mañana a la noche (del domingo) ambos clubes echaron a sus respectivos entrenadores. Primero fue Racing el que le anunció a Luis Zubeldía que no iba a seguir. Lo hicieron los mismos dirigentes que hace 40 días le habían renovado su contrato. Y a última hora, Independiente, de un común acuerdo que nunca es tal, decidieron que Miguel Brindisi tampoco iba a seguir. Aunque por muy distintas razones y en muy diferentes contextos institucionales y deportivos, Racing e Independiente están en la misma situación: sin entrenador y sin proyecto deportivo que sostenga sus respectivos objetivos, que también son muy distintos por cierto. ¿Qué movió a los dirigentes de Racing a renovarle contrato a Zubeldía a mediados de julio y a echarlo el domingo pasado? ¿Los resultados? Si los resultados determinaron la salida del entrenador ¿nada tienen para decir los dirigentes que revalidaron su trabajo con la renovación? Los dirigentes del fútbol argentino tienen una doble personalidad: se presentan como dirigentes pero deciden como hinchas. Así decidió Gastón Cogorno cuando decidió echar a Zubeldía. Lo hizo desde la tribuna y no desde su lugar como dirigente. Fue hincha antes que dirigente. Pero los hinchas no contrataron ni le renovaron a Zubeldía. Fue Cogorno, que nada dijo de eso. Puso cara de circunstancia y a pensar en el sucesor. ¿Y en Independiente qué esperaban de Brindisi en cuatro partidos? ¿Y qué esperan de su sucesor? Con un nuevo DT Independiente espera soluciones al corto plazo, pero no hizo otra cosa que estirarlos aún más.

río suelto