Boca le ganó 3-1 a Godoy Cruz y sigue firme en la Copa de la Superliga

En un partido signado por la intensa lluvia que desnaturalizó el primer tiempo, Boca venció 3-1 a Godoy Cruz y está en los cuartos de final de la Copa de la Superliga. Su rival saldra hoy del choque entre Lanús y Vélez.
En el comienzo, el andar del encuentro fue favorable al Xeneize, quien de entrada aumentó la diferencia en la serie. A los 6 minutos Wanchope Ábila, en un gol típico de ‘9’, se adelantó a todos en el área chica luego de un cabezazo al primer palo de Almendra y tocó al gol. Boca, que había ganado 2-1 en el partido de ida jugado en Mendoza, aumentaba la brecha con el Tomba a dos goles.

El Xeneize no pasaba sobresaltos en el juego, pero el inminente diluvió que amenazó el comienzo del encuentro, se desató con furia sobre la Bombonera y el partido se complicó por completo. La lluvia no dio tregua y el desarrollo de las acciones se fue desnaturalizando ya que el campo no alcanzaba a drenar el agua y el balón dejó de rodar en algunos sectores de la cancha.
A los 20’ Godoy Cruz tuvo una chance clarísima para igualar las cosas, pero Miguel Merentiel cabeceó por arriba del travesaño cuando Esteban Andrada ya estaba vencido.
Nueve minutos después, el árbitro Facundo Tello, en una acertada decisión, paró el partido. La cortina de agua era incesante y la interrupción duró poco más de media hora. La lluvia fue mermando y el juego se reanudó. De aquí hasta el descanso, Godoy Cruz fue un poco más que su rival y hasta tuvo alguna aproximación al área xeneize.

Ya sin precipitaciones para el ST, el Tomba insinuó algo pero las intenciones mendocinas fueron neutralizadas por otro gol de Wanchope. Weigandt trepó por el lateral derecho, combinó con Pavón, quien metió un centro exacto para la entrada libre de Ábila, quien de zurda puso el 2-0.

El Tomba tuvo una alegría antes del final porque el ingresado Richard Prieto, en gran jugada individual, achicó la diferencia al definir cruzado de zurda y le puso suspenso al partido.

Pocos minutos después, Andrada le sacó el empate a Ramis y a Boca se le complicaba un partido que parecía liquidado. Lo fue cuando apareció Zárate (había ingresado por Tevez) quien de tiro libre marcó el tercero y le devolvió la tranquilidad y la clasificación a Boca.