Comercios deberán pagar una tasa por los adicionales de policías en Neuquén

Se aplicará cuando termine la emergencia sanitaria en la provincia. Lo que se recaude será para financiar la caja de retiros policiales del ISSN, la más deficitaria del sistema.

La Legislatura de Neuquén aprobó ayer una ley que añade una nueva tasa de retribución por el servicio de policía adicional en la provincia. Se sumará al valor hora hombre que los comercios pagan por este tipo de vigilancia y todo lo que se recaude será para financiar la caja de retiros policiales, la más deficitaria del Instituto de Seguridad Social del Neuquén.

El proyecto fue sancionado ayer en general y este jueves se trata en particular. Si bien logró la mayoría necesaria para convertirse en ley, recibió críticas de parte del Frente de Todos y el FIT por considerar que generaba una nueva carga impositiva para los comercios ya afectados por la crisis de la pandemia.

«Lo único que hace es poner en tensión a la clase media. Saca de un bolsillo para poner en otro», cuestionó Lorena Parrilli (Frente de Todos), quien graficó que la tasa para los pubs, confiterías y salones bailables «será igual que para los bancos y esto representa un 48% respecto del valor hora hombre». «Es irrisorio», planteó.

El proyecto crea una tasa por retribución de los servicios extraordinarios de vigilancia, seguridad y protección que prestan los efectivos y que deberá adicionarse al valor hora-hombre.

Se comenzará a pagar cuando finalice el plazo de la emergencia sanitaria, que se aprobó en marzo por el término de 180 días.

En el caso de los comercios, el monto será de $80 por cada hora; en acompañamiento de maquinarias, custodia de personas, custodia de vehículos que transporten valores y en espectáculos públicos y deportivos, se elevará a $100; y para pubs, confiterías, bares, salones de fiesta, locales bailables, casinos, salas de juego, supermercados, barrios privados, industrias, bancos, casas de créditos y financieras se deberá pagar $120.

La ley aprobada ayer también crea una tasa por la verificación de automotores y motocicletas. En el caso de los primeros, aplicará sólo para los de antigüedad igual o menor a diez años y será de entre $950 y $1.250 según sea realizada dentro o fuera de la planta verificadora. Para las motocicletas, se considerará las cilindradas iguales o mayores a 350 y el valor será de entre $450 y $820.

Si bien las sumas de la ley son fijos, según explicó Liliana Murisi (MPN), «las mismas van a ser incorporadas a la ley impositiva y allí se producirá la actualización de los montos correspondientes» el próximo año.

La diputada fue la encargada de defender el proyecto, que envió originalmente el gobernador Omar Gutiérrez el 1 de marzo, y afirmó que ayudará a «generar nuevos instrumentos que aporten un nuevo financiamiento a la caja» de los retiros policiales.

El texto que se aprobó dejó exceptuados de pagar la tasa al Estado nacional,
provincial, municipal y sus dependencias, a las reparticiones autárquicas y
descentralizadas, a las organizaciones de la sociedad civil y a las cooperativas.

La diputada Soledad Martínez (Frente de Todos) cuestionó que el tratamiento del proyecto «está absolutamente fuera de contexto de la realidad que nos toca pasar y de las condiciones que los distintos sectores de la actividad privada tendrán cuando se salga de esta pandemia».

Sobre el fin recaudatorio de la tasa, advirtió que «empieza a generar una suerte de solución de a parches de una realidad muy compleja que el ISSN atraviesa».

Su par de bloque, Mariano Mansilla, dijo coincidir con los argumentos pero respaldó la ley por considerar que «se trata de recaudar para que dejen de subvencionar otros trabajadores a la policía». «Hasta que podamos logra el consenso político necesario para discutir el fondo del equilibrio para el ISSN, entiendo que es un proyecto positivo», aseguró.

Desde el FIT, Patricia Jure también votó de forma negativa y reclamó que el Estado «pague la deuda histórica y deposite los aportes y contribuciones que están retenidos al ISSN».

Dijo que una solución es imponer impuestos «al gran capital» e ironizó que Gutiérrez «es malito con los hambrientos y manito de seda con las patronales saqueadoras».


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