“Con todo mi respeto, Cristina”
En este momento no basta con controlar y dejar de comprar lo incomprable, ya lo es de por sí y desde hace tiempo. No entiendo de economía pero que hay una inflación galopante nadie lo puede negar. Entiendo y apoyo sus argumentos cuando dice que hagamos valer nuestro poder como consumidores, no obstante, como están las cosas, se hace difícil porque habría que dejar de comprar prácticamente todo. Cuando los tomates se van por las nubes no los compro, pero todo se va para arriba y se transforma en una tormenta imparable. No sé qué provoca tamaña inflación aunque me tranquilizó que hablara del tema, tan siquiera para saber que lo toma en cuenta. Es algo pendiente, usted debe saberlo, algo en lo que, si no se arregla, los buitres de siempre tendrán caldo de cultivo para seguir horadando. No digo que copie el estilo del presidente de Uruguay, que no me atrae demasiado, pero estaría bueno que se diera una vuelta por cualquier supermercado e hiciera compras durante una semana a modo de control, qué mejor que la experiencia directa, ¿no? Se va a llevar una sorpresa enorme y es posible que estos grandes ponedores –no de huevos precisamente pero sí de precios– se achiquen un poco y afilen sus lápices. Se lo digo porque confío en usted, la apoyo como mujer, como presidenta, como luchadora y como madre, entonces sé que va a entender. Tal vez se les ocurra alguna idea creativa para frenar esta salvajada, tal vez no sea precisamente que usted vaya al supermercado, pero se hace imprescindible que las acciones que se emprendan incorporen no sólo sentido común sino, como dije antes, creatividad y sobre todo lucidez. Incorporar la sensibilidad humana en un lugar de poder hace bien y la gente escucha más. Creo que es un momento oportuno para hacerlo. Maia Zuretti DNI 5.656.519 Buenos Aires
Maia Zuretti DNI 5.656.519 Buenos Aires
En este momento no basta con controlar y dejar de comprar lo incomprable, ya lo es de por sí y desde hace tiempo. No entiendo de economía pero que hay una inflación galopante nadie lo puede negar. Entiendo y apoyo sus argumentos cuando dice que hagamos valer nuestro poder como consumidores, no obstante, como están las cosas, se hace difícil porque habría que dejar de comprar prácticamente todo. Cuando los tomates se van por las nubes no los compro, pero todo se va para arriba y se transforma en una tormenta imparable. No sé qué provoca tamaña inflación aunque me tranquilizó que hablara del tema, tan siquiera para saber que lo toma en cuenta. Es algo pendiente, usted debe saberlo, algo en lo que, si no se arregla, los buitres de siempre tendrán caldo de cultivo para seguir horadando. No digo que copie el estilo del presidente de Uruguay, que no me atrae demasiado, pero estaría bueno que se diera una vuelta por cualquier supermercado e hiciera compras durante una semana a modo de control, qué mejor que la experiencia directa, ¿no? Se va a llevar una sorpresa enorme y es posible que estos grandes ponedores –no de huevos precisamente pero sí de precios– se achiquen un poco y afilen sus lápices. Se lo digo porque confío en usted, la apoyo como mujer, como presidenta, como luchadora y como madre, entonces sé que va a entender. Tal vez se les ocurra alguna idea creativa para frenar esta salvajada, tal vez no sea precisamente que usted vaya al supermercado, pero se hace imprescindible que las acciones que se emprendan incorporen no sólo sentido común sino, como dije antes, creatividad y sobre todo lucidez. Incorporar la sensibilidad humana en un lugar de poder hace bien y la gente escucha más. Creo que es un momento oportuno para hacerlo. Maia Zuretti DNI 5.656.519 Buenos Aires
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $750 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios