Casi 2.000 jóvenes participaron del cierre de los Juegos Rionegrinos en Bariloche

Los gimnasios de Bariloche se llenaron de jóvenes de diversos puntos de la provincia este miércoles. Más allá de los partidos, las hinchadas eran abultadas. Con la participación de 1950 jóvenes, cierra la 12 edición de los Juegos Rionegrinos este miércoles en Bariloche.

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En 11 espacios se disputaron las finales de los torneos de voley, basquet, handball, ajedrez, newcom y atletismo en diferentes categorías e instancias comunitarias y escolares. El evento está destinado a niños y niñas de 11 a 19 años pertenecientes a escuelas públicas y privadas, escuelas municipales, clubes, organizaciones, clubes barriales, asociaciones civiles y juntas vecinales.

Bautista Salazar tiene 12 años y cursa séptimo grado en el Instituto Martín Zuviría. Llegó a Bariloche días atrás junto a sus compañeros para disputar la final de handball. En su caso, conocía la ciudad cordillerana, pero muchos de sus amigos no. Contaron que el colegio no organiza viaje de egresados, pero definieron este paseo «casi como uno».

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«Fue una emoción muy grande saber que habíamos llegado a la final. En Bariloche aprovechamos para pasear por todos lados. Nos llevamos muy bien como grupo, pero algunos chicos gritan mucho», dijo risueño mientras una compañera le pasaba un mate y agregaba: «Antes de irnos, quedó pendiente darnos una vuelta por la pista de patinaje».

«Los chicos emprenden hoy el viaje hacia sus respectivos lugares. Para la organización, el final del evento se da cuando el último chico llega a su casa«, resumió Pablo Cozarin, director de Eventos Deportivos de Río Negro. Recalcó que el proceso previo selectivo llevó meses: de unos 20.000 rionegrinos quedaron 2000 que accedieron a la instancia final.

El funcionario recordó también que en 2020 y 2021 la pandemia no permitió la realización de los Juegos debido a las restricciones sanitarias.

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Tiago Navarro y Manuel Olivera, de Viedma, comentaban el partido. «¿Cómo llegamos a la final? Nos encanta el deporte y nos incentivó el profe», expresaron y agregaron: «Quizás entramos al podio pero si no, de todos modos, valió la pena venir. Nos encontramos con un montón de amigos«.

A pocos metros, un grupo de chicas de Sierra Colorada bromeaba con jóvenes de Ingeniero Jacobacci. Se conocieron en el hotel donde paraban y admitieron que ya habían intercambiado teléfonos.

Valentín Calfilipi, de 12 años, reconoció que fue quien convenció a sus amigos tiempo atrás para jugar al handball. «Nos anotamos en la escuela y esperábamos de alguna forma llegar a la final. Estuvo lindo. Hicimos de todo: hasta me metí en el lago y conocimos muchos amigos de todos lados. El garrón fue perder», dijo.

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Antonia Pereyra, una de las madres acompañantes de la escuela 26 de Sierra Colorada, reconoció que la participación de los Juegos Rionegrinos resultó «toda una aventura» para el grupo de sexto y séptimo. «Hay muchos chicos que hacen deporte desde hace rato y para otros era la primera salida. Nos decían que estaban nerviosos y ansiosos. Más allá de lo deportivo, conocen gente y se reencuentran con amigos», señaló la mujer.

Cruz Cisint, de primer año del Instituto Nuestra Señora del Rosario en Villa Regina, admitió que era su primer viaje a Bariloche. «Me siento emocionado. Vamos a pelear el tercer puesto. Lo mejor fue el hotel que tenía pileta climatizada y desayuno», admitió.

A su lado, Eimi Mondaca, de 14 años de El Bolsón, miraba la final de basquet. «Estamos alentando a unos compañeros. Nosotros ya no pasamos. Pero fue una experiencia emocionante que solo se vive una vez en la vida. Es lindo compartir con tus compañeros y conocer a otros chicos», aseguró.